En esta etapa del proceso electoral se ha exacerbado el ataque de la contrarrevolución, el ejército de los Estados Unidos ha girado instrucciones para burlar la decisión popular el día 7 de octubre de 2012. Pero, dónde está la contrarrevolución, ¿De quién se debe cuidar Chávez? Como dice un viejo adagio, se debe cuidar de sus “amigos y colaboradores”. Como en el 2001, “los amigos y colaboradores” son la cabeza de playa del Ejército de Estados Unidos. Ellos son los que ocultan información vital o permiten las andanzas de las acciones saboteadoras de la contrarrevolución en el suministro de gas y full oil, en el suministro eléctrico; así como, en la sobre carga de la banda ancha en telecomunicaciones. Los “amigos y colaboradores” han puesto miles de bombas de humo para confundir sobre la acción o acciones que están dispuestos a realizar para dar la impresión (el show mediático) de un resultado distinto a la victoria del comandante Chávez y que ya están presentando al mundo a través de sus medios de comunicación. Los revolucionarios han puesto las alertas pero la contrarrevolución es dura y poderosa; como, la impunidad y el descaro es su patente de corso. La contrarrevolución permite e inclusive estimula que la “mala suerte” ocurra y que la descoordinación del pueblo se profundice. Muchos, no todos, “los amigos y colaboradores” de Chávez, también son la contrarrevolución que entorpece la acción administrativa del Estado.
En fin, el personal civil de la contrarrevolución (del ejercito de Estados Unidos) está trabajando arduamente para cambiar la decisión popular. El otro grupo de su personal civil (la oposición) siguiendo órdenes del comando sur sigue elaborando el tinglado para el show mediático, con la ayuda de sus paramilitares y disociados en las calles. Paradójicamente, muchos de los amigos y colaboradores y no menos los opositores han sido grandes beneficiarios del proceso Bolivariano. Pero, el yugo de la burguesía anti-nacional y sus empleados de la pequeña burguesía comercial e intelectual no olvidan a su amo del norte, inclusive lo añoran porque les da seguridad y paz interior frente a lo que califican de la chusma; esto es, nuestra hermosa clase trabajadora y campesina.
Triste resulta el caso de aquellos trabajadores que en el proceso bolivariano obtuvieron cargo de funcionarios públicos y (cuando antes estaban desempleado ), ahora tienen casa, carro, pensión, salud y educación por las políticas incluyentes del proceso bolivariano, sin embargo, no saben, no sienten, no se han hecho conscientes de los beneficios que le ha traído la revolución a ellos en lo personal. Por lo cual se merecen la esclavitud cuarto republicana que actualmente viven tristemente los trabajadores de España, Portugal, Grecia, Italia y Estados Unidos, que vendieron su conciencia al imperialismo occidental y hoy se ven envueltos en una maravillosa lucha de clase para rescatar su dignidad y su consciencia.
El socialismo se construye con una economía socialista y con una consciencia socialista. Nada avanzamos con vividores (cuarto republicanos) del proceso bolivariano y de la renta petrolera. Esto es una demostración que es irrenunciable y urgente; la tarea de construir un socialismo sustentable y sostenible, que ponga en el tapete las razones del por qué es mejor que el capitalismo.
¿De quién se debe cuidar la revolución,? Pues, de los compañeros que se distraigan en la construcción de ese socialismo. ¿De quién se debe cuidar Chávez y quiénes lo acompañamos?, pues nos debemos cuidar de nuestros amigos y colaboradores, traidores, cobardes y oportunistas; así como, de nuestras debilidades, flojera y falta de acción revolucionaria en contra de la contrarrevolución. De aquella que está más cerca de nosotros; pero, también de la que está en la oposición. El ejército de Estados Unidos ataca a nuestro pueblo para minarnos moralmente, seduce a nuestra milicia; pero, allí está la revolución y el socialismo para engrandecernos. Las elecciones y nuestra victoria del 7 de octubre es solo un paso para tener tiempo en la construcción de la economía socialista y la consciencia socialista. En nuestras manos está la victoria, viviremos y venceremos. !Que viva el socialismo¡
