¡Te lo dije Delio! Así solía expresarse Carlitos González, el único comentarista deportivo del país que adelantaba juicios técnicos ante del desenlace de la jugada. Porque sabía de eso y porque era un vergatario. Pues resulta una papaya comentar la jugada después de ocurrida; que es lo que hace la mayoría de los comentaristas actuales. Recuerdo cuando con tres en bases, el pitcher descontrolado totalmente y el bateador con tres bolas sin “estrai”, Carlitos González comentaba jocosamente: ¡Yo las he visto más feas y se han casado! Y resultaba que el serpentinero apagaba ese incendio con tres abanicados.
Pues bien. La enfermedad de Chávez ha hecho que muchos opinadores de oficio metan la pata. Casi siempre lo han “matado” cada vez que viaja a La Habana a proseguir con su tratamiento médico igual que lo hace un paciente cualquiera. Y ocurre y acontece, como dicen las abuelitas chismosas, que el tercio regresa sano y salvo a sentarse en el ture de Miraflores. Tal como lo hizo recientemente al arribar a Maiquetía, proveniente de Cuba, a las tres de la mañana por el aeropuerto internacional de Maiquetía. Pidiendo pista.
Sobre la enfermedad de Chávez he escrito en aporrea tres garabatos en los que he manifestado, sin pretender igualarme con el comentarista Carlitos González, siempre que Chávez saldrá bien de esta emboscada que le tendió la vida. Son ellos: Chávez entrampo a la MUD y a Capriles, del 02 – 06 – 2012; Chávez. Un milagro de Dios, 14 – 05 – 2012 y más reciente Porque Chávez se “inclina” en Cuba y no en Venezuela”, del 29 – 11 - 2012. Leerlos es darse cuenta de la forma como los “bocagranda”y demás “yerbas” escuálidas han pelado bolas criticando la enfermedad del Presidente Chávez. ¡Vayan a lavarse ese paltó!
Con el reciente viaje de Chávez a La Habana los bicharengos se atrevieron a manifestar que el líder venezolano había viajado a Moscú porque los médicos cubanos no habían dado en bola con el tratamiento. ¡Qué arrechos son caballeros!
TINTERO
El Profesor Isturiz la botó de jonrón en su reunión con los empresarios de Anzoátegui. Isturiz les “habló cloro” y los empresarios entendieron y aceptaron el mensaje: No sólo es desarrollo económico y obtener ganancias. El sur es que todos vivamos bien, que todos cubramos nuestras necesidades básicas y extraordinarias. Es decir el mayor cúmulo de beneficios para el pueblo. En este acto le acompañó el presidente del BCV, Nelson Merentes, quien dijo que el BCV apoyará con todos los “yerros” al empresariado.
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