Pero no solo es prensa, radio y televisión nacionales, sino, que, se une a ellos la mediática internacional. Los “tahúres” de la desinformación, de países como España, EEUU, México, Chile, Argentina, Brasil, para solo nombrar los más activos. Día a día, convidan a sus tarifados columnistas a despotricar de Venezuela.
Me cuenta un amigo periodista mexicano, que el negocio hoy en día es escribir contra Venezuela. “Pagan muy bien, artículos y análisis que vayan en línea contraria con lo realizado por la Revolución”. Cuba ya no es noticia, me dice, “la noticia es Venezuela y por supuesto su Presidente”. Entonces para nada debe entrañarnos los comentarios y opiniones del embajador panameño en la OEA contra el país, de hecho, este fascista escribe en un panfleto llamado el Universal.
La pregunta interesante es: ¿Quién financio y cuánto dinero recibió este político de pacotilla y mal pintor (Chaderton dixit)?. Debió ser una buena tajada en dólares. Aquí no podemos tener ambigüedades. El financiamiento proviene de sectores conservadores de los EEUU, y de sectores industriales transnacionales, a su vez, de empresarios venezolanos que dominan los medios de comunicación así, como, dueños de modos de producción.
Es una confabulación nacional – internacional, que piensa que con la enfermedad del presidente y, estando este fuera del país pueden asumir el poder político central en Venezuela. La derecha reaccionaria ha logrado algunos avances, uno de ellos, es tratar de dictarnos la agenda política, lo han logrado con relativo éxito, y por lo visto también la agenda política internacional.
Nuestros dirigentes, deben asumir la defensa del proceso político revolucionario, contra los sátrapas internos y externos, pero a la vez avanzar en la agenda socio – económico nacional, baluarte de la Revolución, no vaya ser, que nuestro apreciado tiempo transcurra en dimes y diretes, mientras el pueblo queda solo en su lucha para lograr sus reivindicaciones.
“El Capitalismo engendra a sus propios sepultureros”; Una vez más Globovisión a través de su bodrio “Alo Ciudadano” y por boca del agente Jesús Torrealba, hacen una apología del embajador panameño, y se coloca al lado de quienes tratan desde fuera entrometerse en asuntos propios de la Republica. Que papelón están haciendo.
Quienes califican al gobierno venezolano como “autoritario”, están viviendo en una ficción permanente. El “autoritarismo” de la Revolución es una falacia. Aquí lo que existe es “Autoridad”. Y como dice el filósofo Fernando Savater..<
Debemos estar muy pendientes de los sucesos que desde ahora han de sobrevenir.
La Revolución tiene demasiadas herramientas para el contraataque. Aun así no debemos dormirnos en los laureles. Y tampoco estar a la defensiva… más ofensiva… He dicho..
pedro2.patino@gmail.com
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