A tres meses de tu partida, recuerdo y te siento como aquel 14 de julio de 2009, cuando te toque, te besé y hasta conversamos. ¿Cómo no recordarlo?

Ese día..., un gran día, mejor dicho EL GRAN DÍA en el que nos entregarían el título de Master en Educación, de la I Promoción de Máster en Educación Bolívar y Martí, del Instituto Pedagógico Latinoamericano y Caribeño[1] (IPLAC). Parte del convenio educativo Cuba-Venezuela, el cual llegaba luego de una larga espera de dos años.

En el Teresa Carreño y entrega Chávez, -nos enteramos-  Na Guará!!!!!

Llegamos al teatro con toga y boina. La boina de la UBV, aunque me hubiese gustado prescindir de la toga, por eso de la transformación y no continuar en el juego del capitalismo vistiendo sus símbolos  y nos organizaron por orden alfabético en grupos de ocho, y en ese orden se subiría al pódium a recibir los títulos.

La sorpresa más grande: Chávez le entregaría el título a quienes quedaron en el puesto número cinco (5) ¡¡¡¡Y YO ESTABA EL PUESTO CINO (5) DE MI GRUPO!!! Les confieso que me conté como cien veces para asegurarme.

Maestría que significaba la profundización en educación,  y el rompimiento con los patrones capitalistas  donde dijiste: En Venezuela hemos estado regidos por la educación burguesa, hoy estamos graduando a los educadores para la liberación, la educación liberadora de Venezuela, que no es otra que la educación socialista y aseguró que la transformación en materia educativa no tiene precedente

Haciendo énfasis en el encargo social Estamos en un proceso de construcción del socialismo venezolano, y para ello, es necesario transformar el modelo educativo para lograr la transformación de los valores del capitalismo y crear los nuevos valores del socialismo, que no es otra cosa que el humanismo y ustedes deben ser la punta de lanza de esta nueva etapa de la educación venezolana.

Y resaltó que la graduación de estos nuevos Master en Educación forma parte de la socialización de la educación, que brinda la oportunidad a las personas de bajos recursos de acceder a títulos que le eran negados por la educación burguesa y capitalista que imperaba en Venezuela.

Luego del discurso comienza la entrega de títulos, ¿yo?, temblaba, reía, lloraba, estaba muy emocionada y asustada, porque con él uno nunca sabe qué preguntará, cuando me correspondió, no sé cómo me paré y caminé hasta EL, EL MAS GRANDE, me estrecho en un abrazo como siempre rompiendo el protocolo- me dijo: no llores maestra que los muchachos te van a ver. Me preguntó el origen de mi familia y los apellidos, que dónde trabajaba, al decirle que era directora de una escuela primaria, le dio instrucciones al Profesor Navarro para que estableciera comunicación directa con directoras y directores de plantel, porque esto era como una guerra, donde se necesitaba intercambio constante, directo y efectivo, subsanando  a tiempo las necesidades para el buen funcionamiento.

Quedó en mi cuerpo y mente su calor, sus ojos claros, su cariño y ternura, su voz varonil y dulce, ese ser humano, con calor humano que siempre tengo presente y jamás podré olvidar.

Gracias vida por haberme permitido estar tan cerca de él, tiempo que para mí es eterno, porque lo siento cada día.

Aunque el encargo de la liberación de la educación de Venezuela, que no es otra que la educación socialista no se ha cumplido, por lo menos yo no he participado ni he opinado sobre la transformación y la construcción del nuevo modelo, para lo cual fuimos formadas/os. Por eso he tomado, por ejemplo, estas trincheras de la opinión escrita, para que alguien nos lea.

Docente MPPE, 29 años de servicio,  Profesora fundadora de Misión Sucre, MsC. en Educación

[1] El IPLAC pertenece a la red de centros de formación de profesionales de la educación en Cuba y ha obtenido por 2 años consecutivos la mención honorífica Rey Seajong de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).