En primer lugar por que la primera vez que los hicimos, logramos un resultado que un escritor español consideró que era uno de los fenómenos mas importante del mundo occidental después de la Revolución Francesa. Porque en toda la historia de la democracia de América Latina y Caribeña, jamás se había producido el insólito maravilloso de que los, los pobres, los sin casa, los desasistido de la vida ganaran una elección popular. Y, mas sorprendente y mágico aún, que repitieran la hazaña catorce veces seguidas. Sin que esta proeza fuera de inmediato, como siempre lo hizo la derecha, respondida con un golpe de estado. Menos que se hubiera producido, como antes fue común, ver frente a nosotros como se producía una guerra o provocado una invasión, para acabar con cuanto la Constitución establece con una dictadura de por lo menos veinte años.
Comprobar que no hay nada más interesante en el mundo que la idea de una república en estado de derecho, democracia y representatividad ganada por votos, en Venezuela demostrado por resultados en Gobernaciones, Alcaldías, y Concejales de todas las tendencias que fueron elegidos.
Sorprende ver la extraordinaria novedad de un fenómeno extraordinario, revolucionarios, inédito: que la oligarquía de un país perdiera las elecciones (catorce veces, además) y se viera obligada a seguir sometida al orden constitucional y solo le quedara el recurso de acudir como vía alterna al juego del golpe de estado, por cualquier vía, posible o imposible.
Sin duda que intentos agresivos ha llevado, lleva y llevará a cabo la derecha, ayer mismo intentaron algo, pobre, desarticulado, sin liderazgo, sin motivo y cuyo producto fue un triste ensayo hacia la nada. Obvio, volverán a intentarlo.
El camino de la guerra silenciosa del acaparamiento y la desmesura del alza irreverente y soterrada de precio de los alimentos y bienes de la vida doméstica es todo un alarde y bravuconada irreverente.
Nosotros seguimos en lo mismo, dominando a esa burguesía y sometiéndola al escarnio de escoltar –aunque pataleen y chillen- el orden constitucional del 1999.
Persistimos por haber logrado tener democracia frente a dictadura de los poderes económicos que han mandado por siglos.
Continuamos con una Asamblea que no sigue la línea de las dictaduras económicas disfrazadas con una fachada parlamentaria.
Al día de hoy, para nada sorprende descubrir cómo la derecha que nunca apostó a los imprevistos electorales, ha sido pillada, y desviada y sacada de los rieles del poder y se le ve desvalida y desarmada para recuperar su extraviado rumbo. Ella, todo solemnidad, pompa y circunstancia, que siempre estuvo blindada, por pactos electorales, soportes institucionales y administrativos y legales y, qué, perennemente, controló “su República”, con absoluta impunidad, por su maridaje con los grandes capitales y su tramada red legislativa y judicial y constitucional, ahora se mira inerme, solo cuenta con el aliento del Departamento de Estado y la tremenda malla de protección y ataque que le proveen los grandes medios de comunicación, cada día menos operantes y rumbo a la difícil senda del 2.0.
Hoy son historia. Cuentos de cómo eran, cuando tenían un ropaje democrático montado a su medida, que permitía tener “derecho constitucional” para qué, quién así lo quisiera, le hiciera comparsa a sus partidos en los procesos electorales ……eso sí… que no pensaran en ganarles, pues de hacerlo, las represalias de la guerra fría, sencillamente te pulverizaba.
Modo del poder que ni lejanamente soñaron los sabios de Atenas, eso, de mirar lo que aquí se logró, un pueblo que se le fue por encima, ….. pero, muy por encima ….. a los señores ricos y poderosos y hoy los tiene velando sueños de violencia, como derecho de pataleo de la saña de los decadentes justicieros neoliberales.
Para mas pistas, al día, solo viudas de un Estado de Derecho que funciona al margen de la dictadura económica capitalista. Todo un poema a la desesperanza y al revanchismo en tono de mamadera de gallo.