Buscando cierta información en algunos portales de internet, nos encontramos con la desagradable sorpresa de que Venezuela es miembro nada más y nada menos que del nefasto Fondo Monetario Internacional (FMI). Al comienzo surgió la duda, pero luego constatamos, mediante la consulta de fuentes oficiales, que ciertamente pertenecemos a esa institución:
De acuerdo a la Gaceta Oficial número 40.289 que circula este viernes, el presidente del Banco Central de Venezuela, Eudomar Tovar, fue designado gobernador principal ante el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Tovar sustituye a Edmeé Betancourt quien mantenía ese cargo.
El decreto entra en vigencia a partir de la fecha de publicación, que corresponde al 7 de noviembre de 2013 (http://www.sibci.gob.ve/2013/11/eudomar-tovar-designado-gobernador-principal-ante-el-fimi).
Realmente inexplicable desde la lógica socialista que se supone caracteriza a los dirigentes del Estado venezolano; el FMI es uno de los emblemas del capitalismo imperialista, responsable del endeudamiento de muchas naciones y del empobrecimiento de millones de seres humanos. Todo en nombre de una supuesta ayuda económica a países en crisis. Ahora bien, en el año 2007 el presidente Chávez, tras responsabilizar al FMI de una serie de problemas económicos y sociales a escala global, anunció el retiro oficial de Venezuela de ese organismo, ¿Qué pasó?, ¿No se dio tal retiro? ¿Se llevó a cabo el retiro y luego se realizó la reincorporación?, ¿Fue simple retórica del presidente?.
Lo cierto del caso es que la Venezuela socialista, antiimperialista y revolucionaria, es miembro de uno de los entes que más daño ha hecho a la humanidad, que aprovecha la desgracia económica de los pueblos para continuar enriqueciendo a unos cuantos individuos. Peor aún es que Venezuela forma parte de la llamada Junta de Gobernadores, rectora del FMI, autoridad responsable de las principales decisiones en diversos ámbitos. En otras palabras, el Estado venezolano es partícipe de una u otra manera del accionar global de tan nefasto organismo, y evidentemente sigue lineamientos del mismo, capitalistas por supuesto. Esperemos que el Gobierno venezolano no caiga en tentación de endeudarse con el FMI, aunque algunos medios de difusión han asomado la posibilidad de que Maduro, el llamado presidente obrero, pueda estar negociando un préstamo.
Quienes aún tenemos la ilusión de que Venezuela se enrumbe al socialismo, deberíamos exigir al Gobierno el retiro inmediato del FMI, por ser un emblema del capitalismo y del desastre social y ecológico que éste ha producido en el planeta entero. Cuando menos deberíamos exigir una explicación oficial bien argumentada, en la que se indiquen las razones por las que se sigue formando parte de dicha institución. ¿Será que la posibilidad de una Venezuela socialista se esfuma con el paso del tiempo? ¿Estaremos en presencia de un capitalismo del siglo XXI con un supuesto rostro humano?.
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