Hacer una revolución es asunto de fondo, es una tarea bastante pesada y que requiere mucha dedicación y entrega, es algo profundo, pero Chávez después del 15 de agosto del 2004, cuando tuvo toda la oportunidad del mundo para hacer una revolución y no le dio la gana de hacerla, empezó a gueboniar a distraernos en pequeñeces aunque eran reforzadas con mucha repetición mediática, la distracción ideal y natural fueron las elecciones, en donde todos teníamos que ir a votar en contra de la derecha golpista, a la par que no se hacían las transformaciones profundas y necesarias, ya que se hubiese podido ir a las elecciones (Era obligatorio ir a elecciones y ganarlas), mientras al mismo tiempo se hacia el socialismo o se transformaba el país, pero no, nada que ver, se incurrió en electoralismo y en distraernos en luchar en contra de un enemigo sin destruirlo a fondo como era quitarle el piso, quitarle el sistema capitalista por otro diferente, que era (y sigue siendo) su principal medio de sustento, se jugaba con él para no destruirlo, como dice el tango Como juega el gato maula con el mísero ratón, el problema es que en ese juego mísero el ratón creció y ya está del mismo tamaño del gato maula y tiene unos dientotes que asustan.
Maduro nos repite la historia y ayer lunes 20 de enero fue una muestra de ello. En vez de impulsar un plan de la nación en donde se empiece a hacer la infraestructura del país para hacer la transformación necesaria e ir al socialismo y se reforme integralmente el código penal y se proceda a penalizar con penas largas los delitos de traición a la patria, entendiendo a este como connivencia o apoyo a única superpotencia imperialista mundial o al terrorismo y manipulación mediática y la especulación financiera y económica con precios de bienes y servicios y la corrupción, reforzando, pero primero reestructurando al fondo, a toda la administración de la justicia penal y civil, en vez de hacer todos esos cambios profundos; se empieza a distraer a utilizar cohartadas y a distraernos en pendejadas frente a la magnitud de las tareas que hay que hacer, se está guevoniando o mejor dicho se sigue guevoniando.
Ahora el enemigo o los criminales ya no son los comerciantes y especuladores financieros y económicos y la meta es el socialismo sino que ahora los causantes del mal del país son los malandros que andan armados en los barrios, en contra de quienes existen mecanismos suficientes y de sobra para combatirlos como toda la infraestructura policial y penal que nos dejó la burguesía pero en donde no existe esos instrumentos y los que hay son bastantes insuficientes es en la lucha en contra de los delitos de cuello blanco, arriba mencionados.
Se distrae al gran público con unos dueños de medios de comunicación por unas telenovelas como si las telenovelas fuesen las causantes de la generación de la violencia (Inciden pero muy poco), más influyen los videos y sobre todo los videos juegos para niños y adolescentes que las telenovelas o la programación de la TV hoy en día.
El problema de Venezuela es un accionar del imperialismo yanqui en contra de nuestro país para destruir un gobierno que a pesar de ir bastante desviado, aun esa desviación puede ser superada y puede retomar el rumbo revolucionario del 27-F-89, ese es el peligro de Venezuela y por ello el accionar del imperialismo con su principal aliado en Sur América, la Colombia Santandereana.
Es de allí de donde proviene la infiltración que ha tenido tanto el estado como el aparato político bolivariano, táctica bastante exitosa que muy pronto se sabrá la magnitud de la eficacia y del éxito de esa táctica de infiltración y entrismo, la manipulación y el terrorismo mediático proveniente de las empresas transnacionales y nacionales de la comunicación y teniendo como contrapartida una pobre contraparte o contra aparato de propaganda que utiliza las mismas armas melladas de su contrincante, pero si aplica censura y tolerancia cero a la crítica revolucionaria y una colosal publicidad hacia el culto a la personalidad.
La especulación financiera con las reservas internacionales en dólares provenientes de la riqueza petrolera y con los precios de bienes y servicios, en donde participan no solo agentes de la derecha tanto internacional como nacional sino que hay una coparticipación y complicidad por parte de agentes del alto gobierno y encargados de ponerle freno a estas especulaciones y hacer justicia.
Pero a la par que se distrae con la programación violenta de la TV, después de 15 años de gobierno revolucionario, en donde ya debiese existir unas TV y un público bolivariano y socialista, para no ir a fondo en contra del imperialismo y sus agentes políticos y económicos internos y vecinos y se señala como enemigo a las bandas organizadas de la delincuencia de los barrios pobres; se prepara para un congreso del partido, en donde desde ya quedaron por fuera la disidencia crítica y en donde se perfila que la clave será la socialdemocratización y la derechización de derecho o estatutaria porque ese fenómeno de hecho, ya es un hecho, y valga la redundancia.
Ayer 20 de enero se dieron pasos muy importantes para la consolidación de un nuevo pacto de punto fijo y para el proceso de socialdemocratización o derechización del aparato político de la revolución, a lo que hay que salirle al paso desde ya, porque después de ojo sacado no vale santa lucia, santa lucia vale es ahora, que están los dos ojos sanos y dentro de la órbita, porque por un lado se llama a un congreso del aparato político para derechizarlo estatutariamente y convalidar una burocracia y por otro lado se maximiza como enemigos del país a quien no lo es a las bandas de delincuentes de la pobrecía, como cohartada a los verdaderos ladrones y enemigos del país, los imperialistas que quieren destruir lo que queda de revolución y los especuladores que estrangulan al pueblo con la complicidad de personeros del gobierno, incluidos alto gobierno, y por otro lado, para ir sellando el pacto de socialdemocratización se sientan en una mesa con los dueños de los medios audiovisuales para tratar sobre un tema que no es el principal problema del país para encubrir y distraer sobre el tema que si lo es, y en donde están involucrados esos dueños que estuvieron allí, quienes ya desde ahora haciéndose los locos se preparan para un nuevo pacto de punto fijo.
