Que nadie diga que no hay humor en nuestra administración pública. Cantv, por ejemplo, tiene una maquinita que puede llamarlo a usted unas doscientas veces por día para preguntarle si no está interesado en el servicio de internet ABA.
En mi caso, reconozco que no fui capaz de resistir tan arrolladora mercadotecnia, y después de hacerme un rato el indiferente terminé por traicionar a mi vieja conexión de Movilnet, cada día más cara por cierto, y acepté ingresar al maravilloso mundo ABA a mediados de diciembre de 2013.
Como lo bueno no tiene por qué tener limite, al poco tiempo me llamaron los amigos de CANTV para preguntarme si no estaba interesado en una laptop, con un financiamiento de dos años, que tenían disponible de inmediato en Maracaibo, donde vivo. Y sin transición alguna me dieron una cita para recoger mi maquinita dos días después.
Confieso que no pude aguantar la tentación de llamar a dos o tres de mis más recalcitrantes amigos escuálidos para restregarles por la cara la eficiencia y la buena atención de una empresa pública. Como decimos en Maracaibo: pa tapales la jeta.
En fin, que me voy el día convenido a recoger mi equipo en una despejadísima oficina de CANTV. Mejor que mejor, pensé, ni siquiera hay cola.
Recepcionista con cara de sorpresa: ¿Laptops aquí? No mi amor, aquí no hay laptops que yo sepa.
Yo con cara de estar comiéndomela: Mire señorita, me llamaron sin que yo lo solicitara para ofrecerme la laptop que debo recoger hoy aquí.
Recepcionista, a pleno pulmón y con cara de yo me quito a este carajo de encima ya mismo: Chincaaaa, a este señor le dijieron que viniese a buscar una laptop hoy,
Chica, asómandose por una ventanilla de esas en las que hay ponerse de rodillas para ver a quien habla: Ay señor, laptops no hay. Lo que pasa es que ellos cuando hay, digamos, 50 computadoras le dan cita a 100 personas.
Me fui. ¿Quién puede con un argumento de tal contundencia?
Bueno, pensé, al menos me queda la conexión ABA.
Un técnico, muy amable por cierto, me llevó e instaló el modem. Todavía no tiene conexión, me dijo, porque tienen que hacer una sincronización en la central. Eso se resuelve en 24 horas Y se fue.
En el tiempo CANTV, por si ud no lo sabía, 24 horas equivalen a mínimo un mes y máximo a la fracción de tiempo que Dios quiera.
Estas líneas las envié a Aporrea gracias a mi vieja conexión de Movilnet.
No me queda otra cosa por hacer que no sea esperar la factura de CANTV cobrándome por el ABA y pensar que les voy a decir a mis amigos escuálidos si es que mis tácticas evasivas no resultan.