En ocasión de que el Departamento de Estado del imperio se encuentra tan preocupado por la situación política en Venezuela; y además afirma que los candidatos están en su derecho de retirar sus candidaturas para los próximos comicios para elegir a los miembros de la Asamblea Nacional, nosotros comenzamos a preocuparnos por su Democracia falsa y cínica.
Nos preocupa el sistema electoral de los EEUU, estamos persuadidos desde hace un bojote de años que allí no elige la mayoría del Pueblo norteamericano sino los famosos colegios electorales. En consecuencia todos los presidentes del imperio son ilegtimos, ilegítimos porque han sido elegidos por una minoría cogollérica, y mafiosa.
Nosotros estamos preocupadísimos por los derechos humanos que el imperio practica dentro y fuera de su territorio. No queremos seguir calándonos esta filosofía del garrote siempre empuñada por ellos.
Estamos hiper preocupados por los jóvenes norteamericanos que están muriendo en Irak. Nos duele ver como regresan envueltos en una bandera que nunca fue suya, ni de las madres que lloran desconsoladamente al lado del cádaver dinamitado de sus hijos. Nos preocupa que los motivos de esa guerra, sean los intereses mezquinos del robo y del pillaje, como siempre han hecho desde los tiempos de su conformación como unión norteamericana. Nos preocupa que la beneficiaria directa de esa invasión sea la Halli Burtun ( no se si esta cosa seescriba así). Estamos mamaos que esten matando y destruyendo a un Pueblo heróico, y grande en su historia para beneficiar a las empresas de los Halcones.
Finalmente estamos requetemamaos que el imperio siga armando golpes de estado en contra de nuestro gobierno revolucionario. La margarita está deshojada, ya lo sabemos todo: la Cia otra vez metida hasta los tequeteques en esta nueva conspiración. Nos preocupa sobre manera el hecho supersospechoso de que la Celestina OEA no le haya aplicado la famosa carta interamericana al gobierno de los EEUU, quie tiene delitos de sobra para merecer tal sanción. Hasta cuando esta mariquera loca de que el imperio tiene derecho de oipinar y meterse en nuestro asuntos, nosotros aquí despabilados sin opinar y sin meternos en los asuntos de ellos.
No solamente debería ser el comandante Chávez quien está obligado por la naturaleza de sus funciones como lider indiscutido de la Revolución bolivariana, el que tenga que opinar sobre nuestros opresores; esta es una obligación de todos: a EEUU con sus tropelerías en el mundo, lo sostiene en primer lugar su poder mediático, nuestro deber es gritarlo a los cuatro vientos de la justicia suprema.
Si no fuésemos capaces de construir un mundo mejor,entonces nuestra vida sería suceptible de ser revisada por aquellos que estan trabajando en ese noble propósito.