Camarada Otaiza, háganos un favor, cuéntele al Comandante como anda las cosas por acá. Seguramente que él estará en rebelión por allá con esa decisión de estar haciendo santos a papas que no lo merecían tanto como otros mortales relegados por la iglesia, como José Gregorio Hernández.
Él seguramente lo convencerá a usted, con sus dotes de buen líder, que ahora les toca revolucionar en otras esferas de la vida, que los asuntos terrenales le corresponde atenderlos a los hombres de carne y hueso. Insista en enterarlo de cómo van las cosas por acá.
Cuéntele que en lo que va de 2014 la derecha ha montado en la olla al gobierno de Nicolás Maduro y que el hombre, aunque sin dudas aprendió mucho de él, en muchos casos no está pasando del discurso, cosa que tiene muy preocupada a gente en las filas de la revolución.
Explíquele que desde el mismo 14 A (2013), apenas llegando Nicolás a la Presidencia se activó la primera fase del fascismo de la derecha que dejó una docena de personas asesinadas por las huestes de Capriles Radonsky. Explíquele que al hombre no pudieron hacerlo preso por razones políticas pero todos saben que él es el responsable de estas muertes. Que después del 12F (2014), activaron la segunda fase del plan que ya lleva 41 personas asesinadas y que aún no paran.
Dígale que Nicolás parece estar afinado y ganando liderazgo cada día, lo que fortalece a su gobierno, pero lo que parece debilitado es la propuesta Socialista que en muchos casos se nota desdibujada.
Háblele de los diálogos por la paz, uno de los presuntos éxitos del presidente Maduro, y del trampón que la derecha ha montado al pueblo con ese chantaje de la tal protesta pacífica que ya suma más de 40 muertos y cuantiosos daños materiales.
Por su puesto que debe aclararle el contexto de la guerra económica que nos montó la oligarquía desde el mismo diciembre de 2013, cuando el se fue a Cuba, y que no ha parado. Pero es preciso que le confiese que los peores daños los han hecho enemigos internos de la propia revolución.
Cuéntele de los 20.000 millones desfalcados a través de empresas de maletín y de cómo hasta el día de hoy no terminan de publicar la lista de responsables y de aplicarles la justicia, a pesar de que el propio Nicolás a cada rato manifiesta públicamente que se publicará la lista.
Háblele de la lealtad del pueblo y de cómo este sigue firme y empañado en defender su legado ante las amenazas de la derecha a pesar de las contradicciones del aparato del Estado y de la dirigencia que en muchas ocasiones se muestra vacilante. Háblele de muchas cosas más que usted como revolucionario sabía que están ocurriendo en el seno de la revolución y de cómo o se corrigen o podemos irnos al despeñadero.
