Urgente. Pediría a gritos una re-impresión masiva en formato de cuadernillo popular del Libro de Abel Prietoi titulado: “El humor de Misha. La crisis del socialismo real en el chiste político” al Ministerio de Cultura e sugeriría incorporarlo a tertulias en los tiempos libres de los debates del III Congreso del PSUV y de otros partidos del GPP.
Allí un cuento que quería compartir:
“En Moscú, se descubre una inyección capaz de resucitar a los muertos y se decide aplicársela a Lenin. Los funcionarios del partido preparan ante la resurrección de Lenin un programa de visitas a centros de producción (destacados por su eficiencia) y la participación de Lenin en algunos “actos de masa”. Pero Lenin pide un momento para caminar un poco por las calles de Moscú. El resultado es que desaparece. Todos los servicios de seguridad e inteligencia lo buscan con gran angustia y desespero, y nada. Una concentración de cuadros en la plaza roja, espera ansiosamente su llegada al acto programado. Ante su ausencia, a un astuto “cuadro del partido” se le ocurre resucitar a Dzerzhinskyii, aquel que conocía todos los escondites de Lenin. Era la persona idónea para ayudar en la búsqueda. Lo someten a la inyección. Dzerzhinsky resucitado, acude a las afueras de Moscú a una vieja cabaña derruida que usaban los bolcheviques en la clandestinidad para comunicarse y donde Lenin le había dejado antaño varios mensajes. Allí encuentra una breve nota personalizada para él: “Félix, te espero en Finlandia. Tenemos que comenzar de nuevo”.
i Disponible en internet.
ii Revolucionario comunista polaco, famoso como el fundador de la policía secreta bolchevique, la Checa o Comisión Extraordinaria, agencia conocida por combatir a reaccionarios y mercenarios contrarrevolucionarios durante el llamado Terror Rojo y la Guerra Civil Rusa
