Casi todos los viejos ministros o del equipo que gobernó con Chávez fueron ya sustituidos por nuevos militantes, una nueva generación que le debe “todo” a la dirección del PSUV y con ello se diseñó una nueva nomenclatura, menos capaz puesto que la nueva dirigencia no cuenta con el talento de Chávez y tampoco con la empatía para llamar a su lado a pensadores, intelectuales, cultores.
Nadie va quedando de las viejas listas de antiguos funcionarios y la inteligencia y conste no hablo de los servicios de inteligencia van quedando al margen del gobierno. De las cosas interesantes es la necesidad de algunos de rasgarse las vestiduras por hablar y defender el liderazgo de Maduro, lo real es que el Presidente de la República es el Jefe de Estado pero no aquel convocante de masas y razones.
La realidad es inquebrantable y es tan cotidiana que ya se va haciendo común hacer colas, hablar de carestía y comenzar a responder por otros, lo cierto es que tenemos un partido que parte, nada de los sectores de izquierda que gobernó hasta ayer.
El caso SIDOR toca muchas fibras y es que en esa zona se formaron muchos dirigentes de la antigua izquierda, creo que la izquierda menos elemental, aquella que había escapado hace ya tiempo del Maoismo y de la servidumbre o a comparsa del gobierno de turno.
Lo cierto es que el gobierno va por todas y solo coloca en la nómina de la política aquellos pequeños funcionarios que le deban todo al presente momento político. Sindicalistas que se quieren ver en el espejo de José Vargas aquel adeco de la CTV y es que si algo se parece a la CTV y a su dirigencia quienes encabezan las organizaciones obreras cuyas masas están en Miraflores o en el hemiciclo de la asamblea nacional y conste que esto toca de manera impactante a Diosdado y a Nicolas y en la Central Bolivariana a Oswaldo Rangel y Will Vera quienes no salen electos o por aclamación de asamblea y si del cenáculo y de la imposición del gobierno, arropados por una campaña mediática, que los transforma de personajes de zarzuela a “dirigentes obreros de gran calado”.
Con los días que vienen vamos conociendo que José Ángel Mollegas aquel de la intervención grosera a SUTISS es como el reflejo en el espejo de esta nueva pléyade de hombres que entre la palabra y el hecho tienen miles de kilómetros de distancia.
Mientras tanto los medios alternativos se van convirtiendo en los espacios de expresión libre y democrática y es que ya sin opiniones diversas dentro de los falsamente conocidos como RED Nacional De “Miedos” Públicos es imposible dar una versión que sustituya a la historia oficial acerca de cualquier acto que se cometa.
Nada mas perverso que el hecho de querer convertir la imposición en SUTISS y en SIDOR en un acto democrático o desconocer las denuncias mil veces hechas acerca de lo que no encontramos, claro como mal chiste de algunos nos piden pruebas. Pero como encontrar pruebas de algo que no existe o que el salario no da para encontrarlo cabilla, cemento, gas.
Yo siento que el artículo de Juan Linares acerca que los funcionarios ganen salario mínimo se quedó corto y es que ya se vuelve a escuchar aquel alarido en los años de la IV que hoy esta repotenciado. “YO NO PIDO QUE ME DEN / PERO PONGAME DONDE”HAIGA”.
Lo demás es añadidura y es que un proceso que comenzó como un ramo de flores hoy va camino a transformarse en una margarita deshojada. Carente de razones y belleza y solo uno que otro burócrata, habla y habla de renuncia mientras saborea un whisky de 18 años y gasta en peleas de gallos decenas de miles…
La democracia sigue siendo una quimera y la revolución también.
