Mientras sectores opositores de derecha insisten en derrocar al gobierno, abrazados al gobierno de Estados Unidos y sus aliados europeos, el gobierno del presidente Nicolás Maduro en un acto defensivo hasta ahora ha demostrado a veces timidamente y no pocas oportunidades de manera enérgica que la situación se está controlando, no obstante, la ofensiva guerrerista continúa avanzando en medio de contradicciones aparentes que buscan horadar en primer lugar la base chavista en el seno del pueblo y por otra parte de manera sutil, endulzando a miembros llamados de izquierda que en busca según ellos de los argumentos validos del como profundizar el socialismo y combatir el capitalismo de manera focalista e inmediatista, le sirven en bandeja de plata elementos que luego la derecha utiliza para elaborar sus argumentos.
Hablar de chavismo por una parte y madurismo atribuible a quienes apoyamos la gestión del Plan de la Patria y al presidente de la República, introduce indefectiblemente elementos divisionistas con sentido de establecer diferencias donde no las hay y ofrecerse ante el enemigo como salvadores del legado de Chávez, por ende, con la razón consustanciada de su parte. Bueno es decirlo, que semejante postura política en lugar de diferenciarnos, lo que está produciendo no muchas confusiones pero sí, malestar en las filas del verdadero chavismo representado por el presidente y la dirección del PSUV y Gran Polo Patriótico.
Por supuesto que, en todo esto, una de la principales críticas trasciende a lo económico y financiero, igual los de la oposición como cierto grupo que se autodenomina los verdaderos defensores del legado de Chávez y que por supuesto generan quizás. no sea el próposito, a lo interno del chavismo desesperanza y criticas abiertas en lo económico y lo político que repetimos le proporciona materia prima al antichavismo para sus ataques a la economía, y al proceso socio político.
La conspiración económica y agregamos comercial por la impronta que ocurre en contra del pueblo, indudablemente que crea desasosiego en las clases populares, fijense que la distribución de productos están llegando a los supermercados situados de Chacaíto hacia el Este de la ciudad con mayor regularidad y volumenes de colocación, produciendo la migración de los sectores populares, embrión de las colas que vemos a diario, con las subsecuentes molestias y el aprovechamiento de personas dedicadas a la reventa de productos en el mercado informal.
Al respecto, se evidenció en el Automercado Plaza de Los Chaguaramos, entrega de pacas de productos de toda índole por la parte trasera en cantidades importantes, quizás con la anuencia y/o complicidad del gerente; igualmente en el mismo automercado del Cafetal, con el advenimiento de decenas de motorizados y vehículos de 42 puestos que llegan con la gente inmediatamente a hacer las colas, ocasionando que los productos tengan poca estancia en lo lugares donde se colocan generalmente fuera de los anaqueles y en sitios estratégicos a la entrada de los mismos; pacas sobre pacas indistintamente de leche, pañales, café, margarina, etc.
Estamos en presencia de una conspiración a la cual hay que derrotar por supuesto con la aplicación de instrumentos legales, pero importante es, la incorporación del poder popular para desbaratar todos los planes de la derecha. Creemos firmemente que la reunión con las cúpulas de las asociaciones de supermercados, distribuidores y comercializadores, no ha dado algún resultado positivo, por tanto la orden emanada del propio Presidente debe cumplirse en lo inmediato con respecto al procedimiento de encarar uno a uno a cada establecimiento de manera que se comprometan bajo firma a cumplir con la Ley y en consecuencia con el pueblo.
Por último, los interlocutores con estos señores deben ir preparados con la información de cada uno de ellos, sobre resultados de producción y/o importación, despachos y volumenes de las colocaciones, lugares y vigilar simultáneamente los precios, es la manera de evitar las triquiñuelas, trampas y banalidades que generalmente presentan.
