Con gran interés escuchamos el reciente discurso del Presidente Nicolás Maduro en la Asamblea Nacional, en ocasión de la presentación de su memoria y cuenta de la gestión 2014 de su período gubernamental.
Además de destacar su exitosa gira por Europa y los países de la Opep, se ventilaron asuntos de interés de los venezolanos y se presentaron denuncias que siguen la pista a terroristas quienes no cesan en sus ataques contra la Revolución Bolivariana.
Recordamos como en los días de los actos fúnebres del Comandante Supremo Hugo Chávez Frías en la Academia Militar de Venezuela, en Fuerte Tiuna, un periodista preguntó a José Vicente Rangel por sus impresiones sobre la designación de Nicolás Maduro como sucesor de Chávez en la Presidencia de la República y este le contesto:
- El tiempo se encargará de decir porque el Presidente Chávez designó como sucesor a Nicolás Maduro.
La sentencia de José Vicente se ha ido macerando en el tiempo y ha resultado una acertada decisión; sobretodo, si de continuar la Revolución y la obra de Chávez se trata y más aún, de hacer realidad el Plan de la Patria.
La cosa no ha sido fácil para el Presidente Maduro. Los avatares y ataques continuos para el gobernante, han ido más allá de la rutina. Los enemigos de la Revolución Bolivariana, aupados por el imperio norteamericano, no han descansado ni un solo día y prueban las más variadas estrategias que en muchos de los casos han dado resultados al imperio en otros países, donde han tumbado sus gobiernos, cosa que no han podido lograr en la Patria de Bolívar.
En la actualidad la despiadada guerra económica ha ido en aumento y han sembrado inquietud y descontento en una gran parte de la población, donde reina un desconcierto al convertirnos en unos anormales bachaqueros, ya no sólo en la frontera, sino en las diferentes ciudades del interior de Venezuela.
La planificada acción para crear desabastecimiento, al estilo de la "Casa de los Espíritus" chilena es ya el pan de cada día en el país. Con la diferencia de encontrar un pueblo, que si bien ha sentido la escasez de sus productos básicos, no ha caído en la provocación de enfrentar pueblo contra pueblo y no ha tenido el eco que encontró esta estrategia golpista en las Fuerzas Armadas chilenas,muy diferente a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana del Comandante Chávez.
El equilibrio del mercado ha sido roto y la angustia de los venezolanos ha sido trastocada hasta convertirnos en unos compradores compulsivos, más allá de las necesidades creadas por los medios de comunicación en una sociedad de consumo. Su consecuencia se ha vuelto una amenaza y una angustia permanente en los venezolanos, ante el peligro de la escasez de los productos y el pensar cotidiano de no encontrarlos mañana.
A la par de la actual situación,la cual trata de paliar el Gobierno con su política de Seguridad Alimentaria y el control de la distribución de productos por parte de los distribuidores privados, ha surgido otra amenaza exterior, es la relacionada con la baja de los precios del petróleo.
Es en este escenario donde ha surgido otro enigma el cual siempre, por muchos años, ha rondado como una decisión política sobre los gobiernos que ha tenido nuestro país, desde la cuarta y ahora en la V República: el alza de los precios de la gasolina.
Sería interesante revisar lo que pensaba sobre esta materia el Comandante Chávez y la cual, actualmente se pasea o ronda por la cabeza del Presidente Maduro. La misma genera expectativas sobremuchos dolientes, quienes se soban las manos esperando que el alza de la gasolina sea una realidad.
De verdad que existen muchas razones que apuntalan tal decisión, incluso su constante comparación con los precios internacionales y el precio de un litro de agua potable en el mercado.
La cosa suena lógica, pero detrás de ello hay una gran verdad la cual no hemos logrado exterminar de raíz y acabar de una vez por todas, pues representa un verdadero cáncer para nuestra economía. Es el contrabando de extracción hacia Colombia, donde de una manera mutante se mantiene el adefesio que permite un subsidio hacia el país vecino, del cual por cierto no tenemosuna recíproca colaboración; porque a decir verdad, es allí donde se benefician.
Las medidas adoptadas pornuestro Gobierno y en especial por nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), en los últimos meses han sido efectivas. No obstante, la tentación por la corrupción y la diferencia cambiaria mantiene intacto el contrabando el cual desaparece epilépticamente, pero que vuelve a surgircomo un ave de fénix corrompiendo a los guardianes de nuestras fronteras.
Si echamos números, notamos como se han enriquecido las mafias que no sólo están en Colombia sino en nuestro país. La verdad es que dicha ganancia comparada con el pago que los venezolanos haríamos por el aumento de la gasolina,sería insignificante con la que obtendrían quienessiempre han negociado con nuestra gasolina en la frontera. (Ver números en Pdvsa)
Incluso, nos atrevemos a decir que serían los más beneficiados con el alza de la gasolina, porque obtendrían mayor ganancia que nuestro Gobierno venezolano con el alza.
Concluimos con un sincero aplauso para el Presidente Maduro (política de Chávez) por la sabia decisión de por ahora, no aumentar el precio de la gasolina hasta tanto no hayamos acabado de raíz con el contrabando hacia Colombia,lo que representa una papa caliente para el Presidente Nicolás Maduro Moros… ¡Amanecerá y veremos!