El modelo de producción agropecuario que han sostenido todos los Gobiernos venezolanos desde la época gomecista, cuando este se inicia, hasta nuestros dias, y que se ha venido desarrollado de manera paralela a la economía rentista petrolera he hacho crisis, causando en consecuencia un grave daño a la seguridad y a la soberanía alimentaria, pues nos ha condenado a la importación de grandes volúmenes de productos vegetales y animales, por encima del 70%, para la alimentación de la población venezolana
Dicho modelo de producción agroindustrial se fundamenta en tecnologías importada, (maquinarias e implementos agrícolas y pecuarios) e insumos, como son los casos de las semillas, los abonos inorgánicos, los pesticidas e insecticidas, y otros, los cuales son altamente dependientes de las grandes trasnacionales de la producción agropecuaria a nivel mundial, la Monsanto entre otras, es un buen ejemplo para ilustrar lo que aquí afirmamos; a pesar de las reformas agrarias, el financiamiento con tasas de interés preferenciales han sido dirigidas a los grandes productores y no a los pequeños
Cuando el Presidente Chávez planteó la alternativa socialista y bolivariana para nuestro País, hablo de la sustitución del modelo de producción capitalista por un modelo de producción socialista, las perversiones del modelo de producción capitalista en el campo ha conllevado al establecimiento del latifundio, y a la acumulación de grandes capitales para la oligarquía agraria a costa del empobrecimiento de nuestros campesinos y al despojo de sus tierras, incluyendo a nuestra población indígena originaria, que fueron desplazados de sus tierras autóctonas, e incluso muchos de ellos eliminados físicamente, tal es el caso del compatriota Sabino.
Los llamados "Movimientos verdes" han venido planteando como un modelo alternativo el modelo Agroecológico, el cual se basa en el mismo paradigma del modelo agroindustrial capitalista, difiriendo sólo en el enfoque del impacto ambiental, pero sin abordar la causa de la explotación de la naturaleza y de los seres humanos, las cuales tienen que ver esencialmente con el modelo de Desarrollo capitalista en términos globales, que constituye el marco para la producción agroindustrial que prevalece en Venezuela.
En el Proyecto Bolivariano se plantea y se propone como una alternativa radical, el modelo de Producción socialista, fundamentado en el desarrollo de unidades productivas a mediana y pequeña escala, donde el trabajador del sector no sea el peón de los empresarios del campo, y donde la plusvalía que se deriva de la producción agropecuaria se traduzca en condiciones de vida material y de felicidad para los productores agropecuarios; la agricultura familiar y la producción en conucos son formas productivas claves en nuestro Proyecto Socialista para el campo, dado que nuestra población es urbana es muy conformando el 90%, de su población total no podemos suprimir totalmente la producción agroindustrial, pero debemos darle peso progresivo al Modelo Socialista de producción en una perspectiva Ecosocialista, en la cual la sustentabilidad pase a jugar el papel fundamental en el proceso productivo, es decir el mejor equilibrio entre la producción agro alimentaria y la preservación-regeneración de la naturaleza, poseemos millones de hectáreas con tierras cultivables y agua en abundancia, es decir todas las condiciones suficientes para abastecernos en rublos como cereales, hortalizas, frutales y raíces y tubérculos, e incluso para exportar, también en cuanto a lo que a la producción animal se refiere.
Debo señalar que sólo las gestiones de los Ministros JJ Montilla, el primero en ocupar la cartera de Agricultura y Tierra y la del actual, José Luis Berroteran, han apuntado en la dirección correcta para el logro de la soberanía y seguridad alimentaria, condición fundamental para lograr nuestra plena independencia como república.