Ambos son indispensables para el golpe que necesitan. El analfabetismo político y la perversidad de la oposición no dejan de sorprender. Empecemos por la absurda lista de condiciones para participar en las elecciones de Diciembre.
¿Será verdad que están convencidos que ganan si se depura el Registro Electoral? ¿Será cierto que creen que ganan si se eliminan los capta huellas y las máquinas de votación? ¿Será que esperan obtener resultados electorales diferentes si los votos los cuentan otros? ¿Será?
Yo no creo. Serán ineptos y mentalmente incapacitados, pero eso es diferente a ser mal intencionados. Con lo de la lista la oposición actúa de mala fe. Ellos saben que al fin y al cabo no afectará un resultado electoral que muchos ya comienzan a aceptar como una realidad inevitable. A menos que pase algo…
Existen razones de “inteligencia” que justifican la elaboración de la fulana lista. Calentar la calle es la principal. Ahora complementada con la cuenta regresiva que inexorablemente nos llevará a “La hora cero”, se crea el suspenso el cual esperan que culmine en un vainero. Las condiciones en si es lo de menos, lo importante es el vainero.
Las autoridades gubernamentales deberían rechazar las condiciones electorales. La razón es muy sencilla. Todas están basadas en el falso precedente del fraude “cualitativo, continuado, selectivo y masivo”.
Por cierto que a Tulio se le olvidó agregar que el fraude fue también “perfecto”. ¡Nadie lo ha podido demostrar!
Irónico sería que en un año electoral la oposición tenga que reconocer que hay al menos una cosa que el gobierno ha hecho bien. ¡Dígalo ahí Miguel Ángel! Pero, por ahora es mejor dejar este tema para otra ocasión.
Hablemos de la terca e irracional insistencia en un candidato único. Eso es simplemente estupidez en su más pura expresión. No se puede llamar de otra forma el pensar que si se montan dos borrachitos en el mismo auto, esto reduce las posibilidades de que se estrellen. Esa es la “lógica” de los que aspiran a gobernar de nuevo. ¿Será? Si es así, yo les vendo el eslogan de campaña:
“¡Como todos estamos jodidos, jodámonos todos unidos!”
Seguido por supuesto de, “¡Ni un paso atrás!”, ni siquiera para pensar…
El candidato único es un esfuerzo inútil. Me explico. Consideren a dos candidatos de la oposición que han perdido varias elecciones. Candidato “A” tiene 4% de apoyo del padrón electoral y candidato “B” cuenta con el 6%. Para mejorar sus posibilidades de triunfo, estos dos deciden unir fuerzas. Donde los “cerebros” de la oposición no dan pie con bola es en las consecuencias de esa “unidad”.
La “teoría del odio” dice que si “A” y “B” odian a “C” (¡de Chávez!), juntos lo odiarían aún mucho más. En base a esto se asume erróneamente que cualquiera de los dos candidatos obtendría 10% de los votos, la suma de los votos de ambos. Esto es caerse a mentiras.
No hay manera de garantizar que TODOS los que apoyan a “A” automáticamente apoyarán a “B”, o viceversa. La oposición también olvida que hay gente de “A” que odia a “B” y gente de “B” que odia a “A”. Es más, hay gente de la oposición que odia a “A” y a “B” mucho más de lo que odian a “C”. Me reservo el derecho de tener que darles algunos ejemplos.
Por otro lado, la oposición insiste en subestimar al dueño de los votos, el pueblo venezolano. El mayoritario rechazo a los candidatos de la oposición ha sido evidente y enfático. Es estúpido pensar que esto pueda cambiar por el hecho de que en vez de cuatro o cinco candidatos a “rechazar”, la oposición nos presente solo uno.
¡Al contrario! Es el rechazo a ese candidato, y no el apoyo, lo que sería de proporciones mayúsculas.
Pero hay una explicación para insistir en semejante estupidez. La razón es tener a quien “retirar” cuando “las condiciones” no se cumplan. Porque, “Las condiciones en si es lo de menos, lo importante es el vainero.”
Por eso han dejado bien claro que TODAS las condiciones deben cumplirse y, solo ellos tendrán el poder de decidir si se cumplieron o no.
Otra cosa. Los “cerebros” de la oposición no pueden ignoran un hecho histórico muy significativo: en todas y cada una de las elecciones desde 1998, Chávez y su movimiento han sacado más votos que toda la oposición junta. No hay nada que indique que esa tendencia podría cambiar en los próximos seis meses.
La “solución” no es electoral. La oposición lo sabe. No hay intenciones de participar en elección alguna. Lo de la lista de condiciones es parte de un plan de “calentamiento”. Lo del candidato único es otra carta que eventualmente “retirarán”.
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