La Guerra Económica contra el pueblo venezolano y el Gobierno bolivariano por parte de las trasnacionales, de la oligarquía parasitaria y del imperio norteamericano es real, no es ficción ni mera fantasía, dicha guerra se expresa de mil manera, tantos como rostros tiene el Capitalismo, entre esas manera tenemos la distribución selectiva de los productos de la cesta básica, el remarcaje de precios, el acaparamiento para producir escasez artificial, e incluso han infiltrado la estructura del Gobierno en todos sus niveles, incluyendo al propio gabinete del Presidente Nicolas Maduro; la burocratizacion, la corrupción y la ineficiencia es prueba irrefutable de lo que aquí afirmamos. El propósito fundamental que motiva la Guerra Económica es defenestrar al chavismo, desalojar del poder sea como sea al Presidente Maduro, el surgimiento de la boliburguesia, cuya existencia también es real, tampoco es cuento, esta última se nutre de la renta petrolera a través de los dólares preferenciales provistos por el sistema de administración de divisas, la boliburguesia le hace el juego a los promotores de la guerra económica, recordemos el defalco de 260.000 millones de dólares, con la guerra económica, se plantean sustituir a este gobierno por agentes títeres, que seguramente actuarían al servicio del gran capital, de una oligarquía voraz que pretende volver a apoderarse de un país como el nuestro, de una impresionante riqueza que viene dada por la existencia de grandes yacimientos minerales, reservas de hidrocarburos y gas natural, de gran riqueza hídrica, además de una y una exuberante biodiversidad, el capitalismo mundial requiere de mucha materia prima, y nuestro país las posee en demasía.
Para enfrentar el monstruo de mil cabezas del capitalismo en la presente coyuntura se requiere de una vanguardia revolucionaria con claridad ideológica tanto en el Partido como en el Gobierno, libre de infiltrados o quinta columnas, sin desviaciones social demócratas, se requiere de un gabinete ministerial donde cada uno de sus integrantes posean posturas definidas en la perspectiva socialista y profundidad del conocimiento en sus respectivas áreas de gestión, con experiencias y experticias necesarias, cosas que no se logran de la noche a la mañana, no se trata de ser Ministro para aprender en el ejercicio del cargo, mediante ensayo y error, se trata de una gestión con capacidad de respuestas ante la crisis, particularmente en las áreas de la economía, agrícolas, de salud, educación y de ciencia y tecnología entre otras.
La activación de la producción agrícola, el desarrollo de la pequeña y mediana industria, y de la producción petroquimica, para satisfacer nuestra demanda interna y para exportar productos elaborados de la industria petrolera en vez del crudos, el desarrollo del turismo dentro de parámetros de protección a la naturaleza, lucen como imprescindibles para lograr niveles adecuados de sustentabilidad y avanzar en el camino de la soberanía.
El actual gabinete del Presidente Maduro, no pareciera tener la capacidad de maniobra para sortear la crisis en pleno desarrollo y la agudización de la misma que podemos vislumbrar sin necesidad de hacer grandes esfuerzos para visualizarla en el mediano y corto plazo, creemos que hoy más que nunca debemos aplicar el Golpe de Timón, que sabiamente nos dejara el gran líder del proceso bolivariano, el tiempo no espera y el monstruo de mil cabeza del capitalismo nos está atacando con toda su capacidad y para los revolucionarios vencer es necesario. Marea Socialista propone un plan inmediato para salir de la crisis que invitamos a leer.
Cambio del equipo de gobierno con plan de emergencia para enfrentar la crisis, propone Marea Socialista.
