En VTV, de manera muy acertada, están colocando un vídeo de Hugo Chávez, quien prediciendo un momento como el actual, nos dice que aunque estemos inconformes con algo, como que no hayamos sido beneficiados por la Misión Vivienda, no podemos apoyar la burguesía. Por ello diré por qué votar el próximo 6D a favor del proceso revolucionario, y las consecuencias de no hacerlo.
Si en un supuesto negado ganara la derecha, la soberanía que hemos alcanzado, en un abrir y cerrar de ojos, se nos iría. Algo que tenemos, muestra de amor, perfección, nobleza y justicia, es el Plan de la Patria. Perder las elecciones, se traduce en poner la patria en manos tan inescrupulosas como las de Mendoza y Hausmann.
Algo más que perderíamos inmediatamente son las misiones. Para la derecha opositora, éstas representan un gasto innecesario. Vimos cómo en reunión de la Asamblea se niegan a la aprobación de créditos para mantenerlas. Todas son importantes, pero algunas vitales, como la Adulto Mayor, Vivienda y Alimentación. Y también las educativas, Robinson, Rivas y Sucre.
Definitivamente, antes de Hugo Chávez, la clase media estaba estrangulada. Los intereses de las tarjetas de crédito eran más del 50% anual; las cuotas balón o los créditos indexados –préstamos con tasas variables, con un pago mensual sujeto a la inflación, que hacen que la deuda crezca hasta pagar diez veces más el valor del bien- golpeaban a quienes alardeaban formar parte de esta clase. Entonces, en menos de 48 horas, estas medidas de aniquilamiento regresarían.
Nuestros abuelos volverían a recibir una pensión del Seguro Social equivalente al 20% del salario mínimo, y no de manera regular, para colmo. Y si por alguna razón protestaran, tendrían encima las ballenas de la policía anti bolivariana.
Por último, quienes piensan que si gana la banda opositora tendrán los alimentos de la cesta básica sin colas, desconociendo que ésa ha sido la campaña de la oposición: crear caos; al día siguiente, tendrán estos productos diez o veinte veces más su valor. Estarán ahí exhibidos, pero nadie podrá comprarlos.
En definitiva, esto y más, sin duda, pasará si el 6D no retribuimos con nuestro voto apoyando los candidatos de quien dio su vida a favor de una nación libre, independiente y soberana.