Hace tiempo, luego de las elecciones regionales del 2012 para elegir Gobernadores y Legisladores, conversé con una amiga militante que se había postulado como Legisladora para el estado Sucre por el sector indígena (con un partido fuera de la Alianza del GPP). En esa breve tertulia se resaltó que a pesar de ella no salir victoriosa en la contienda electoral estadal, había logrado un importantísimo y legitimo triunfo en una de las 7 parroquias del municipio Sucre (Cumaná).
Viendo los números de esos resultados, se destacaba, por ejemplo: que en el municipio Sucre ella logró tan sólo el 12,04% mientras la candidata ganadora por la revolución obtuvo 45,09% de los votos. Sin embargo en la parroquia donde habitaba la amiga candidata recibió el respaldo del 31,09% de los electores frente a un 24,74% de la finalmente adjudicada Legisladora.
La conclusión de esa conversación, donde analizábamos los resultados de las 7 parroquias y fundamentalmente las 2 únicas con población indígena. Fue que los indígenas no eligen a sus representantes en estas contiendas, sino los habitantes de las parroquias y municipios poblados mayoritariamente por "criollos".
El artículo "Por ahora" del escritor Luis Britto García, me motivo a retomar este aspecto, en cuanto leí: "En esa lucha la oposición acaba de obtener 112 de 167 escaños en la Asamblea Nacional. Tres de ellos corresponden a representantes indígenas, a quienes el bolivarianismo concedió más derechos que cualquier otro gobierno".
Ciertamente, comparto de manera plena el comentario realizado por Luis Britto García. ¿Cómo es posible que los 3 Diputados recién electos de la representación Indígena en la Asamblea Nacional no sean integrantes de las fuerzas revolucionarias? ¿Cómo explicar este fenómeno si en este sector la revolución bolivariana ha hecho significativos aportes en su visibilización y dignificación?
En el marco de la inclusión social y la democracia participativa y protagónica promovidos por el Comandante Hugo Chávez y continuado por el presidente Nicolás Maduro, podemos enunciar como un gran logro, la aprobación por parte de los Diputados y Diputadas revolucionarios, la Ley Orgánica de los Pueblos y Comunidades Indígenas.
Artículo 1:"El Estado venezolano reconoce y protege la existencia de los pueblos y comunidades indígenas como pueblos originarios, garantizándole los derechos consagrados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, los tratados, pactos y convenios internacionales y otras normas de aceptación universal, así como las demás leyes de la República, para asegurar su participación activa en la vida de la Nación venezolana, la preservación de sus culturas, el ejercicio de la libre determinación de sus asuntos internos y las condiciones que los hacen posibles
En esta Ley Orgánica de los Pueblos y Comunidades indígenas también se señalan los aspectos relacionados a: del hábitat y tierras, ambiente y recursos; de los derechos civiles y políticos; de la educación y cultura; de los derechos sociales; de la economía; y de la administración de justicia.
Por lo anterior y por todo lo que conocemos, no es comprensible que la revolución pierda elecciones en el sector indígena. Estamos seguros que en sus asentamientos y comunidades voto a voto gana el Chavismo y la revolución bolivariana, de eso no hay que tener la menor duda. Lo que habría que revisar para procesos futuros es la forma que se elige proporcionalmente los representantes de este sector, considerando las dimensiones de los territorios parroquiales, municipales y estadales.
Por ejemplo, para elegir los 3 representantes indígenas ante la AN el 6D, se esperaba concurrieran 7.362.470 electores a nivel nacional ¿esta cifra es oficialmente de solo electores indígenas o es el padrón electoral abierto (indígenas y criollos) de varias regiones del País?
De esos 7.362.470 electores, fueron escrutados 5.317.313 votos (4.577.755 válidos y 739.558 nulos) aun así, esas cifras no son reflejo de la decisión autónoma de nuestros pobladores indígenas, la gran mayoría de esos votos se hicieron desde las grandes ciudades. Las maquinarias y la publicidad urbana terminan decidiendo electoralmente sobre los representantes indígenas. Por eso, nuestros 3 Diputados o Diputadas Indígenas revolucionarios debieron recibir desde sus comunidades el apoyo para que fueran representantes desde las fuerzas revolucionarias y patrióticas, pero lamentablemente desde las ciudades los ciudadanos y ciudadanas "criollos", tergiversan la expresión genuina de la autonomía indígena y hoy resultan electos 3 voceros (con el apoyo de la burguesía y su ataque despiadado mediático y económico al pueblo venezolano) no para beneficios de sus etnias sino para intereses ajenos y contrapuestos a su cultura.
"Con el Poder del Pueblo, construimos el Socialismo"
Benitolopez13@hotmail.com
