Después de las elecciones del 6D, en donde la oposición arrasó con la mayoría de curules en la Asamblea Nacional, una serie de eventos se han puesto sobre el tapete.
Empezamos por la oposición: Para ellos se acabo el mito del fraude, ya no tienen ningún argumento, sino reconocer que tenemos un sistema electoral blindado y reconocido por expertos en la materia y por supuesto aquel cuento del desconocimiento al Poder Electoral. En donde gritaban a los cuatro vientos que supuestamente el CNE respondía a los intereses del gobierno, también quedó desestimando a todo nivel. Sin contar que el triunfo del bloque opositor trajo consigo la paz a nuestro país, no porque ellos son generadores de paz, por el contrario son los causantes de la violencia, y de no haber salido favorecidos, sabrá dios cuántos inocentes hubieran pagado las consecuencias de sus arrebatos y llamados, que bastantes víctimas y daños nos han ocasionado en los últimos 17 años, esto también queda demostrado y los desenmascara ante el mundo, como los únicos violentos en el país, aunque quieran hacerlo pasar por debajo de la mesa. Lamentablemente a los interesados a nivel mundial de que este gobierno caiga, muy poco les interesa ese grupo, su botín no es darle poder a la oposición es quedarse con lo que posee nuestro país. Así que buscarán obtenerlo con o sin oposición, pero si consiguen la forma que las marionetas se lo pongan en sus manos sin resistencia no se vería tan evidente su codicia.
Ahora cierto es que está vez la oposición no armo berrinche, ni quemo, ni destruyó, y se abrazan a esa constitución que durante tantos años han rechazado, y han tomado este triunfo de una forma desbocada, sobre todo Ramos Allup, y Capriles, el primero parece muchacho con juguete nuevo, pero un juguete peligroso, porque en las imágenes presentadas nos mostraba así, como que iba a cortar cabezas, sin contar la cantidad de barbaridades que alcanzó a decir. Y Capriles le enseñaba a sus oyentes y a los presentes allí que lo aplaudían y les parecía gracioso, las señas de como se habían fornicado el chavismo. ¡Que vergüenza! Que falta de seriedad política. Pero esto no es todo apenas se supieron los resultados, amanecieron las hienas pidiéndole cuentas a sus críos. O sea los empresarios empezaron a dar ordenes de como funcionarían las cosas en la Asamblea, cuales serán las nuevas leyes a discutir y aprobar, por supuesto violando nuevamente la constitución, es que siempre han sido los mismos. El mismo grupo, la misma elite, nunca hubo independencia política en la IV, y ahora han salido al frente sin ningún tabú, mostrando los colmillos. Como si se estuviesen montando un nuevo gobierno y como si el pueblo fuera el mismo de hace 20 años atrás. Son tan predecibles que dos días después ya el pueblo empezaba a despertarse del fraude que fue haberles dado un poquito de poder. Es que es ilógico como creer en unos políticos que siendo gobiernos locales en estos momentos, tengan sus estados en paupérrimas condiciones, si son incapaces de levantar un estado ¿Cómo van a levantar un país? Simple ellos no son quienes dan las ordenes lo dejan claro tanto de un lado como del otro.
Por otro lado ese sacudón que el gobierno recibió le dio un giro a la revolución, porque ahora el gobierno está obligado a escuchar, desde las catacumbas al pueblo más sufrido, más afectado y que tiene deseos de ser escuchado, dar sus aportes, tiene proyectos, tiene ideas que está allí separado, entre sus deseos y la burocracia que algunos en el gobierno han formado alrededor de las verdaderas intenciones de Nicolás Maduro que no es otra, que hacer del legado de Hugo Chávez un sueño posible. Ahora es cuando el eslogan AQUÍ MANDA EL PUEBLO va a dejar de serlo, para convertirse en una realidad, el estado tendrá que trabajar codo a codo con el pueblo, ya basta de que papá estado nos resuelva y si no resuelve cambiamos de gobierno, o somos revolucionarios en la lucha o somos dependientes acostumbrados a que nos faciliten la vida. Aquí esta en juego todo, desde la silla de Miraflores hasta la última gota de petróleo que nos pertenece por ley, es el momento de que dejemos de llorar y buscar culpables por la derrota sufrida, busquemos nuevas alternativas y salgamos a la calle los verdaderos revolucionarios sin violencia, con la constitución en la mano, sin dejarnos provocar, porque el amor que profesa un revolucionario, para la oposición, es como una daga en el corazón para un vampiro los mata, que nosotros no hayamos reaccionado violentamente el 6D, a ellos los tiene desconcertados. Debemos continuar así pero sin dormirse ahora es cuando la verdadera lucha empieza, porque el lobo nos aulló en la cueva no podemos dejarlo pasar.
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