"Desde varios años, el BCV ya ha utilizado la figura del financiamiento o entrega de créditos a empresas del Estado, específicamente, a Pdvsa, a pesar de la prohibición. Analistas económicos han criticado esta práctica al alegar que ha sido para "financiar el déficit público", lo cual está prohibido por la Constitución.", es lo que recogemos de Prensa YVKE.
¿Y por qué podría tener déficit público un Estado que es propietario de la riqueza manejada por el BCV? Porque dentro de los constituyentistas de la actual Constitución hubo mucho infiltrado puntofijista para impedir que el gobierno de turno desviara fondos "en sí mismos provenientes del petróleo" que "le pertenecerían" a los "dueños" o prestamistas extranjeros, como el FMI, que tenía por esa vía constitucional el privilegio de ser el prestamista favorito del Estado puntofijista. Por eso, tales infiltrados nos dejaron ese perverso legado de la 4ta. República, hoy, al fin, sacado del juego.
Por lo demás, la decantación del chavismo seguirá su curso; es dialécticamente científico que cada día de avanzada revolucionaria surjan desenmascaramientos, saltos de talanquera, destape de ollas podridas, etc.
El chavismo sigue albergando mucho gatopardista, periodistas[1], altos burócratas, personajes sembrados por los traidores más connotados del chavismo incipiente, y quienes hasta ahora han jugado un extraordinario papel como excelentes actores y actrices, como buenos Tartufos en la Política Nacional.
[1] Estas son presunciones derivadas de manifestaciones de estos personajes que dejan mucho qué desear con sus frecuentes y ambivalentes actuaciones arropadas con el manto de una supuesta objetividad o eclecticidad que no existe, de paso.
