He sido asiduo lector de los textos que se utilizan para estudiar el desarrollo de guerras; desde la revista Military Review y libros como El Príncipe por Maquiavelo, El Arte de la Guerra de Zun Tzu, De la Guerra por Karl Von Clausewitz, pasando por los audiovisuales producidos por el canal History Chanel entre otros los veo con sumo interés para compararlo con los escenarios de la política; y por lo menos se que para tomar una posición estratégica en un campo enemigo primero hay estudiar las debilidades del adversario y detectar el punto o los puntos donde atacar; luego de asediarlo hay que ablandar los objetivos, bien con artillería y fuego a distancia, o bien con bombardeos desde el aire para evita que el adversario contenga la embestida de la caballería, en épocas pasadas o la infantería moderna y su arsenal de guerra con tanques y hombres que ocupen posiciones en "cabezas de playa".
Desde hace años las guerras se preparan en salas de estudio y simulación bélica, donde la mediática juega un papel fundamental. En estos laboratorios de guerra se estudia con encuestas, seguimiento informativo, análisis de conducta colectiva, detección de los miedos o temores de la sociedad a ser atacada; la difusión de rumores para avivar los temores detectados sobre determinado problema social, para estructurar la estrategia comunicacional a implementar contra ese enemigo.
Los EEUU han sido "maestros" en estas estrategias, con mas fuerza luego de la II Guerra Mundial, y los aportes de estudios realizados por el nazismo y un tanto por el imperio japonés, que utilizaron prisioneros de guerra para sus experimentos. Médicos, psicólogos, sociólogos y otros profesionales en estudios de la conducta humana copilaron todos los experimentos realizados, incluso hasta llegar a la muerte de sus "conejillos de india", para obtener "fórmulas" condicionantes del ser humano, empleados posteriormente hasta en sus predios para someter a la población, atemorizándoles y sembrar miedos en la sociedad con fines comerciales, políticos, militares y religiosos entre otros.
En el país nos sembraron, con la complicidad de la burguesía criolla, el modelo de conducta ideal para el norteamericano, sin que ello fuese cierto incluso para los mismos estadounidenses; cuyos jerarcas fijaron como objetivo, desde la misma independencia, apoderarse de territorios extra nacionales, bien colocando fichas locales o invadiendo con sus "marines" para colocar igualmente títeres bajo su mando; y todo ello para usufructuar la riqueza del país intervenido, o cercar a naciones no afectas a los dictámenes de Washington. Pero siempre con fórmulas conductuales prefabricadas para aparentar la justificación necesaria de acción contra el país adverso que supuestamente le agrede.
Hoy toda esta información y estudios han producido lo que se denomina Guerra de 4ta Generación para atacar y/o defenderse en las guerras asimétricas, donde la importancia comunicacional es fundamental como herramienta bélica. Por ello es vital entender todo esto para la comprensión de lo que hoy el presidente denominó Guerra Económica, que no es mas que la intensificación y concreción del ataque contra nuestra Nación por parte de los factores financieros y militares del poder transnacional y sus aláteres criollos.
En nuestro país estos poderes fácticos emplean toda una gama de herramientas mediáticas para complementar las acciones directas de la guerra asimétrica; durante el paro petrolero impidieron la venta y distribución de productos necesarios y fallaron; hoy han cambiado la estrategia invirtiendo la formula con parcial éxito, lo cual les permitió mediáticamente acusar y responsabilizar al gobierno del problema y ganar de manera circunstancial la mayoría de la Asamblea Nacional. Simples pero estudiadas consignas penetraron la siquis de muchos votantes, incluso de simpatizantes del chavismo por las colas para comprar alimentos; medicinas, repuestos para vehículos y la obtención de las divisas para viajar o comprar en el exterior hicieron mella en la conducta colectiva; la caída de los precios del petróleo contribuyó a fortalecer miedos que se transmutaron hacia la rabia provocando el efecto "voto castigo", incluso repito dentro de las filas chavista.
Sin embargo las mentiras tienen patas cortas; los slogan y consignas utilizadas por la variopinto oposición se devuelve como un bumerang; "Vota para eliminar las colas", "Vota para que compres con los anaqueles llenos" fue un artificio publicitario que no obedece a la realidad especulativa de quienes articularon la especulación y el acaparamiento de productos; el Bachaqueo se fortaleció y sigue golpeando a quienes creyeron y votaron por "el Cambio". Hoy esta oposición cobarde ni siquiera asume con responsabilidad las mentiras propagadas en campaña y articulan nuevas conjuntamente con los medios de comunicación para "sacar a Maduro en seis meses", tal como lo confesó Ramos Allup desde la misma instalación de la AN. Ese ha sido su único propósito desde que Chávez inició el proceso revolucionario, trastocando el modelo neoliberal cuarto republicano por el modelo humanista y socialista que aún no se consolida por los ataques constantes a que se le somete.
Hoy estamos en pleno proceso de reorientación social y económica; por fin nos dimos por enterados que debemos hacer grandes esfuerzos para deslastrarnos del rentismo y producir, producir como fórmula socio económica para potenciarnos como Nación y garantizar los insumos que necesitamos diariamente, sin embargo reitero que el Poder Popular debe ser el protagonista de esta transformación en cada área propuesta en los Motores del Desarrollo. No podemos marginar al pueblo que debe empoderarse y para ello debe ser capacitado, entrenado y concientizado de su rol; estructurar la contraloría social de manera eficaz y efectiva e incorporar a las comunidades en esta lucha de manera ideológica y permanente. Solo así contribuiremos para hacer la Patria soñada.