¿Renunciará Maduro?

Que el país se encuentre en una gran crisis económica, y que el blanco de las criticas sea Maduro, casi en su totalidad, es solo una excusa para descargar el odio que desde hace 17 años ha tenido la oposición, primero por Chávez, ahora por Maduro. Todo el mundo sabe, hasta los que tienen 4 ojos, pero para nada, porque no ven, sino hasta donde su odio se lo permite, que hemos vivido una gran guerra económica, acentuada por la disminución de la renta petrolera y por la globalización económica, que lo único que ha hecho es evidenciar que el sistema económico mundial está enfermo, tal como lo afirmó, Lorenzo Mendoza en estos días para referirse a la economía venezolana, como si él no tuviera culpas.

Es preciso afirmar que, sus empresas neurotizadas por la economía global, también han colaborado en la generación de hechos que han enfermado nuestra economía. Por ejemplo, han creado productos no requeridos por la sociedad venezolana, valiéndose de la publicidad, como si fueran esenciales para el consumo diario del venezolano. Como muestra, en la situación actual es más fácil conseguir un "Migurt" o cualquier otro producto sin valor dietético alguno, que harina, arroz, pasta, entre otros, que forman parte de la dieta diaria, pero que también se duda respecto a su valor nutritivo, si nos atenemos a que viven ligando la harina o el arroz con todo lo que se les ocurra, para aumentar el precio.

Asimismo, sus empresas han generado en los consumidores, un comportamiento irresponsable que los ha convertido, como lo señala Parramon(2015) en compradores compulsivos, ávidos de consumo, a cualquier precio y con cualquier forma de pago. Eso ha dado vida al bachaqueo, que de manera campante va de la mano con los distribuidores de productos, en una perfecta sociedad especulativa, en donde el gran perdedor es el pueblo. Por lógica, esto influye en la caída del ahorro y en el endeudamiento familiar; además de abonar el camino hacia la pobreza, como tal.

Después de todo lo dicho, puedo señalar que, achacar solo al gobierno todos los males que padecemos, forma parte de una excusa que utilizan los enemigos del gobierno para decirle al presidente Maduro que debe renunciar. Recalco, que sobre el aspecto económico es donde se ha hecho énfasis para atacar al gobierno. Y produjo buenos resultados, al hacerse la oposición de la mayoría en la asamblea nacional, desde la cual, se afincan para proferir las amenazas, que todos sabemos, se han hecho al presidente de la república.

Ahora resulta, que la renuncia es una de las mejores alternativas que tiene el presidente para entregar el gobierno. Y la exigen quienes de alguna manera, vienen desde hace tiempo, socavando las bases del chavismo, pero a la vez haciendo intentos de crecer sobre ellas. Es decir, todo el mundo, quiere crecer políticamente sobre el chavismo. Nadie se dedica a crecer políticamente sobre su propio liderazgo o ideas. Parece más bien una pelea por la herencia política de Chávez. Mientras en la asamblea, Borges con su ley pretende tomar la Gran misión vivienda Venezuela, otros quieren tomar la base chavista para sus propósitos divisionistas.

Pero, si suponemos, que el presidente le hiciera caso a algunas individualidades que por razones políticas quieren verlo fuera de Miraflores, y renunciara sin tomar en cuenta la gran parte de pueblo con que cuenta todavía, ¿sería eso suficiente para que mejorara la situación del país? No, porque si Maduro renunciara, que lo dudo, un mes no bastaría para reorganizar el chavismo y elegir el nuevo candidato para enfrentarlo a la oposición, que ya tiene su Macri preparado. ¡Dios nos libre!

A todas estas, ¿Renunciará Maduro? Ta ta ta tan, No se pierda nuestro próximo capitulo.

 

Referencia

 

Parramon h, Josep (2015) Una alternativa al capitalismo neoliberal San Vicente: Editorial Club Universitario.



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1897 veces.



Jesús Rafael Barreto


Visite el perfil de Jesús Rafael Barreto para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Jesús Rafael Barreto

Jesús Rafael Barreto

Más artículos de este autor