En Argentina ganó Macri y las políticas neoliberales volvieron y están comenzando a recordar a este pueblo hermano qué intereses defienden los gobiernos de derecha; en Venezuela aún la derecha no ha conquistado todo el poder político y ya se han comenzado a instrumentar políticas neoliberales contrarias al pueblo y a sus intereses.
Después de la Semana Santa, el pasaje urbano fue disparado en un 75%, mientras el salario del pueblo trabajador apenas se incrementó en 25%, pero ya los transportistas anuncian que no garantizan que mantendrán el incremento a 50 Bs., previsto para noviembre; o sea, no se conformarán con un incremento de 150% en el pasaje, una manera de decirle al pueblo que a finales del 2016 vendrán por más.
Incrementaron significativamente precios de atún, arroz, café, leche, aceite, etc., etc. Parece que la sacrosanta lógica de "costos de producción" a la que el capitalismo recurre para imponerse en el mercado ya se instaló en Miraflores y viene dispuesta a barrer con todo lo que se logró con Chávez.
Francamente no creemos que Maduro sea el incapaz que algunos dicen, incluso desde las filas del chavismo y la Revolución; si estamos seguros que hay mucho bandido en el gobierno que con la partida de Chávez y convencidos de que el fracaso de la revolución es inminente cada día apuestan a que se consolide el "chavismo sin Chávez", que no es otra cosa que unos pillos que controlen el poder y los recursos al margen de proyectos ideológicos.
Lo más peligroso de lo que ocurre no es que la derecha extrema gana espacios cada día, al final la mayoría de la gente rechaza que volvamos al pasado de la cuarta república y menos aún bajo la conducción de los adecos o de los fascistas de primero justicia. Lo peligroso es que el debilitado gobierno de Maduro le está haciendo, de manera lenta pero sostenida, el trabajo a la derecha de restarse el apoyo del pueblo.
El pueblo no puede seguir viviendo de promesas, de la esperanza de que algún día el gobierno confrontará a los bandidos y a los corruptos, de la idea de que el Socialismo es mejor que el capitalismo pero que en el nombre del Socialismo quienes están gobernando aliados con los capitalistas toman decisiones que desfavorecen al pueblo.
El pueblo chavista está resteado con Maduro, pero debe Maduro restearse con ese pueblo que hoy está siendo brutalmente golpeado por políticas que solo benefician al capital y a sus intereses.
El pueblo que el 6D apostó erróneamente por un "cambio" que se vea en el espejo de la Argentina y que recuerde que la derecha gobierna siempre a favor del Capital y de sus intereses.