El triunfo de la contrarrevolución en la Asamblea Nacional va a resultar mucho más beneficioso para el chavismo que para la oposición golpista. Desde el primer momento, el Sr. Ramos Allup, presidente temporal de la misma, se encargó de dejar en claro que para ellos la AN no es un foro para legislar en favor del pueblo sino un medio para derrocar al Presidente Nicolás Maduro, acabar con el chavismo y reorientar el país en función de las estrategias del Departamento de Estado de los EEUU.
El terrorismo mediático, psicológico y material, la inconstitucionalidad de las "ocurrencias" de la oposición y las provocaciones permanentemente del Sr. Ramos y compañía han tenido un efecto distinto al esperado por los enemigos del proceso bolivariano. El Presidente Maduro ha fortalecido su liderazgo nacional e internacional, la FANB ha asumido el papel preponderante que le corresponde en esta guerra y el pueblo se ha movilizado en torno a la defensa de la Patria y del legado de Chávez.
A pesar de la considerable merma de los ingresos, del esfuerzo que significa tener gobernar bajo asedio y de las contradicciones internas, el Gobierno ha logrado neutralizar los ataques del imperio más poderoso del mundo. Ha conseguido cerrar el primer semestre en relativa paz e iniciar la segunda mitad del año con la Gran Misión de Abastecimiento Soberano y Seguro "Un despliegue Cívico-Militar progresivo, apegado a la constitución y a las leyes de la República, que tiene la finalidad de resguardar, supervisar y hacer seguimiento a los sistemas de distribución de productos de primera necesidad, para garantizar que se haga de una manera transparente, legal y ajustada a las necesidades de los venezolanos"
Súper Misión orientada a "retomar la senda para la construcción del socialismo, desviada por estos ataques a la economía". Concebida para eliminar a corto plazo las aberraciones y la corrupción generadas por el saboteo empresarial y el mercado ilegal de alimentos, medicinas y productos de aseo personal y para establecer a mediano plazo una base productiva y distributiva adecuada a las condiciones y recursos de nuestro país y a las necesidades reales de los venezolanos.
Despliegue Cívico-Militar que no puede ser saboteada por la apertura sin un control estrictísimo de la frontera que tanto daño le ha hecho a nuestro país, ni por una sustitución de importaciones tradicional, reiteradamente fracasada en Venezuela y todos los países del llamado Tercer Mundo.
Importantísima iniciativa con la que todos, desde los CLAP y otras organizaciones, debemos apoyar con nuestro conocimiento, nuestra experiencia y nuestro trabajo.
