Haciendo referencia al título de mi artículo donde de manera algo sarcástica y satírica toco el tema de la crítica ausente en el seno de la revolución. Donde todo aquel que medio se atreve disentir lo ven como un traidor, agente de la cia, apátrida y toda una constelación de calificativos que te agota.
El PDTE DE PDVSA EULOGIO DEL PINO tocó un tema que en estos momentos tiene que ser sometido a debate, me refiero a la serie de expropiaciones que ejecutaron no nada más en el campo petrolero sino en general, ante su crítica, las respuestas no se hicieron esperar al menos de parte de Elías Jaua.
La profunda crisis que padecemos evidenció muchos errores que se pudieron evitar, las expropiaciones que en su momento tuvieron su fin estratégico para una determinada misión, hoy por hoy ya ese propósito no es posible. Las empresas expropiadas, el estado no tiene flujo de caja para inyectarles capital y ponerlas productivas, por lo tanto se impone el pragmatismo, se tiene que reconocer que en estos momentos la empresa privada puede ayudar mucho a la situación, el estado solo no puede.
Pero yo solo estoy aquí arando en el mar con estas líneas. Sabemos que en las altas esferas del gobierno lo que priva es el DOGMA y la ceguera ideológica, si se habla de la empresa privada como un motor para la ayuda a la producción en estas circunstancias críticas, levantan las cejas por sus prejuicios ideológicos.
Las economías modernas el en siglo 21 de izquierdas o de derechas, socialistas, socialdemócrata, sea cual sea el modelo que impere en una nación, cohabita con el sector privado. No se puede confundir socialismo con estatismo son cosas muy distintas, ya las experiencias "SOCIALISTAS" del siglo 20 demostraron que eso no funciona, el país ya es otro, no tenemos el PAPA Petroleó, o el gobierno rectifica el modelo económico o se va al despeñadero y el pueblo venezolano también lamentablemente ¿ el pueblo lo permitirá? No creo que sea así, PERO AMANCERA Y VEREMOS.