De una produccion de 100 millones de toneladas de acero anuales , en la década de los noventas, nuestro amiga Nación, China, esta produciendo en la actualidad casi un BILLÓN de toneladas, es decir diez veces mas con lo cual se ha visto en la necesidad de encontrar mercados internacionales para su excedente. En los últimos 20 años la inversión china en en construcción, edificios habitacionales, rascacielos, vías a lo ancho del pais, factorías , lineas ferroviarias ha sido enorme, disminuido en la actualidad, sin hacerse ajustes en la produccion de acero para evitar desempleo que se ocacionaría. Esta situación ha creado difícil problemas a países exportadores de acero en Europa, Asia y hasta el mismo Continente americano. USA, por ejemplo, ha quintuplicado incrementado aranceles para su importación, otros han hecho ajustes similares.
Ahora bien, ¿se ha estudiado la situación venezolana de SIDOR?
Con tantos buenos profesionales en el Gabinete y personal ejecutivo del gobierno , es posible que ni se lean estas lineas en virtud de que ya deben existir , no uno, muchos estudiosos, quizás no tratados aun, con el Sector Labor que continua en la necesidad de apoyo del Estado para financiar su escasa produccion, aunque si se leyó lo dicho por el Vice, Izturiz, que esperaba que se auto abasteciese. ¿ Como ? Los costos actuales de produccion estan por encima del precio internacional de exportación posible, amigo Ministro, Jesús Faria y si se aumenta su produccion, lo que viene siendo razonable ante su capacidad instalada, el mercado nacional , no podría consumirla, mucho menos pagar el precio en constante incremento en bolívares. No cabe la menor duda, es difícil la situacion de nuestra aceria, gran preocupación para el pais, en especial sus empleados y fieles trabajadores.
Se ha mencionado que es el * reprochable * capitalismo chino * que ha causado este malestar global y que sitúa a nuestra industria de acero de depender por muchos años mas del flujo de financiamiento del Tesoro Nacional para el cumplimiento de sus pagos. Ajustar su produccion al estimado de consumo nacional, dígase, para el próximo quinquenio, luce lo mas acertado, pero mas de uno, dirá que el Socialismo arregla ese problema, sin la necesidad del sacrificio de personal alguno. De modo, que seguirá siendo , como mencionado anteriormente en este escrito y casi desde su fundación en la década de los setentas, tremendo colador de las finanzas publicas del pais. Señor, bendice nuestro bello país!.