El Papa de la Iglesia católica (Francisco), cuyo nombre secular es Jorge Mario Bergogio (1936) quien entre otros cargo fue superior provincial de los Jesuitas de la República Argentina he ejercido un liderazgo reivindicativo de los pobres a nivel mundial, un hombre de modales sencillos, sin ostentación ni poses, ha reiterado que si realmente se sigue a Cristo "pisotear la dignidad de una persona es un pecado grave" recatando en su ejercicio pastoral las enseñanzas de Jesús de Nazaret, un hombre ponderado pero al mismo tiempo firme en la defensa de los derechos de los pobres de la tierra, guiado por el amor a sus semejantes y por los principios trascendentes del cristianismo. Su servicios como mediador ante el conflicto indisoluble que mantiene la Oposición/MUD y el Gobierno Bolivariano/PSUV ha sido solicitado, conflicto que cada vez se ha venido agudizando más y que prácticamente nos coloca en la disyuntiva de " Dialogar o de matarnos", ante tal circunstancia ambos bandos de la polarización venezolana han solicitados como ya dijimos la mediación del Vaticano para que en conjunto con la UNASUR y los ex presidentes Zapatero, Fernandez y Torrijos, nos ayuden a transitar por la vía del Dialogo fecundo y constructivo para el logro de acuerdos necesarios a fin de evitarle más padecimientos y sufrimientos al pueblo venezolano, y especialmente a su segmento de mayor vulnerabilidad ante la escasez de alimentos y medicinas, de la galopante inflación y de la inseguridad pública y ciudadana, así como también contener los elevados niveles de corrupción y de burocratismo, aun cuando en la realidad pareciera no haber voluntad política en ninguno de los estamentos de la dirigencia de ambos polos para llevar a cabo el Diálogo orientado por la agenda señalada.
El Papa Francisco tomó la decisión de designar un segundo Cardenal para la República Bolivariana de Venezuela, es de hacer notar que en Latinoamérica la gran mayoría de los países poseen un solo Cardenal, de manera que el hecho de tener hoy en nuestro país dos Cardenales es una deferencia que nos hace el Vaticano y en particular el Papa Francisco, lo que seguramente es motivo de orgullo para la mayoría de los feligreses de la religión católica, así como también para los integrantes de otros credos religiosos y también laicos, hermanos todos, si el recién Cardenal designado que es Monseñor Baltazar Porras, tiene o no posición política, a mi manera de ver me parece un hecho irrelevante, pues como ciudadano tiene derecho a optar políticamente por quien se le antoje, a menos que utilice el cargo de Cardenal para operar de manera conspirativa contra el orden democrático, y constitucional vigente, por lo que independientemente de su jerarquía eclesiástica se expondría a la aplicacion de las sanciones legales correspondientes.
Lo que considero que no debe ser, es que se ataque a la persona elegida por el Papa, quien haciendo uso de sus facultades pontificias designó como Cardenal a Baltazar Porras, utilizando argumentos fútiles y de poca valía, la actuación del Cardenal señalado durante el Golpe de Estado conocido como el "Carmonazo" contra el Presidente Hugo Chávez, en Abril del 2002 fue pública y notoria, pero a este ciudadano nunca se le sometió a juicio legal alguno, y en cuanto al argumento de sus supuestas preferencias sexuales, aparte de ser un argumento homofóbico y discriminatorio, padece también de debilidad argumental para atacarlo por su resiente designación como Cardenal.
Considero que la actitud del Diputado Hugbel Roa no se corresponde con la de un militante socialista y revolucionario serio, y que como dice Monseñor Mario Moronta, debería solicitar disculpa por las ofensas proferidas y la actuación violenta durante la sesión de la AN el pasado Martes, en todo caso errar es de humano y la rectificación nos engrandece, no podemos soslayar el efecto que tales ofensas tienen sobre la base de la feligresía de la religión católica venezolana, por otra parte nuestro lenguaje debe ser de paz, humildad, respeto y de tolerancia, seguramente ganaríamos más.
