Ante las declaraciones emitidas por el M/G retirado CLÍVER ALCALÁ CORDONES el día de ayer en la ciudad capital donde expresa su disposición a colocar su firma en el proceso que actualmente sigue LA OPOSICIÓN venezolana para convocar al Referéndum Revocatorio contra el Presidente Nicolás Maduro, no me queda alternativa más que salirle al paso a tan desacertada posición de un hombre que ha venido en los últimos meses fijando posiciones críticas frente al gobierno del Presidente Maduro, así por ejemplo, se manifestó contra la explotación del Arco Minero donde coincidimos plenamente, pero, lanzarse a la arena política a apoyar una convocatoria hecha suya por la oposición venezolana con todas las consecuencias que esto puede traer al movimiento revolucionario me parece tamaña equivocación de Clíver y de todos aquellos que de alguna manera hemos hecho críticas constructivas al gobierno de Nicolás Maduro por su desacertada gestión fundamentada en la pérdida de oportunidades desde que inició su mandato por voluntad del pueblo venezolano entre los cuales me incluyo. La inercia, el dejar pasar, el atribuirle todas las causas de la crisis sólo al hecho de una guerra económica, el no haber seguido las instrucciones dejadas con mucha firmeza por el Presidente Chávez de la política de Vuelta de Timón fueron paulatinamente profundizando la crisis hasta llegar a lo que hoy tenemos. Los revolucionarios estamos obligados a profundizar mucho más allá en el análisis para la toma de decisiones, es allí donde debemos mirar lo que sucede en América Latina donde golpes de Estado, golpes parlamentarios y golpes suaves han venido exterminando a los gobiernos progresistas con un diseño geoestratégico del Pentágono donde el Presidente Barack Obama lo que más desea es entregar como un trofeo al gobierno de Venezuela, esta primera y justificada precisión hace que los hombres y mujeres de la Patria analicemos con tiento e inteligencia nuestras posturas políticas. La oposición venezolana se dejó llevar por la idea inoculada por Henry Ramos Allup de poner a rodar la cabeza de Nicolás Maduro en escasos 6 meses dejando de lado la posibilidad constitucional de activar el Referéndum Revocatorio para retomarlo cuando los lapsos sencillamente no les dan para revocar a Maduro en 2016 culpan al CNE, cuando fue una política completamente deliberada para ahora provocar el caos. No les importó activarse para las elecciones de gobernadores debido a sus problemas internos, política que con toda seguridad les hubiese dado buenos dividendos. El hecho de que el gobierno-partido haga esfuerzos por evitar el Referéndum (nadie de un hacha a su verdugo), no implica que algunos sectores de izquierda se unan a la desesperación tanto de Obama como de la oposición venezolana. Estas posiciones como la de Clíver Alcalá son producto de la sordera del gobierno quienes lejos de buscar la UNIDAD DEL PUEBLO CHAVISTA, les da piquiña la más mínima crítica que se les haga ante tantos desaciertos juntos. El Referéndum es Constitucional y las trabas como las del TSJ contradicen el espíritu de la Carta Magna lo que trae más crisis política ante el resquebrajamiento institucional.
