El PSUV ya no puede lidiar con la culpa, con sus fracasos y sus incapacidades, nada da resultado es como buscar una fórmula inexistente o como lograr la cuadratura del círculo, ahora la grosería va más allá de aquella quimera constitucional que dice letra por letra dice: Artículo 5. ° La soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, quien la ejerce directamente en la forma prevista en esta Constitución y en la ley, e indirectamente, mediante el sufragio, por los órganos que ejercen el Poder Público. Se vota por Aristobulo Isturiz "y gobierna" Nelson Moreno. Se vota por Tareck El Aissami "y gobierna" Caryl Bertho así con Diputados, Alcaldes, etc. La tan cacareada soberanía, solo es una soberana mentira.
Ahora ya no basta el Carnet del PSUV ahora es el Carnet de patriota o de patota, no sé cuáles serán los requisitos para obtener tan importante documento, pero que al parecer según muchos tiene poderes muy grandes tantos como podamos imaginarnos, no solo para ser seguramente parte de la Administración Publica, conseguir algún contratito, asistir a escuchar la palabra sanadora de Diosdado, leer los lucidos y heroicos textos de Jaua. Este Carnet De La Patria con sus "mágicos poderes" pudo ayudar a Andres Eloy Blanco a crear poesía más sublime, a Pocaterra a ser más valiente frente a la adversidad, a Humberto Fernández-Morán a desarrollar más su ingenio a favor de la humanidad y seguramente le hubieran otorgado el Premio Nobel (ya de por si merecido), quizás el Doctor Jacinto Convit no solo hubiera el Príncipe de Asturias debido a la ausencia de tan codiciado carnet le hubiera permitido hacer más aportes a Venezuela. Esa oportunidad de tener un Carnet De La Patria quizás te muestre el camino para solucionar acertijos como conseguir gasolina en un país petrolero o que la Bolsa del CLAP venga completa, consigas productos a precios regulados.
Con el Carnet De La Patria Elías Jaua podrá regresar en el tiempo sin necesidad de un DeLorean DMC-12, para corregir detalles como ex Ministro de Agricultura y Tierras y hacer del desierto tierra fértil y hacer a Venezuela un país autosuficiente en alimentos.
Imagino, pienso, considero que caray si ese Carnet que se me parece tanto a la mentada Tarjeta mi Negra, si esa que repartió Manuel Rosales la recuerdan esa tan nombrada: https://www.youtube.com/watch?v=pwcaVtGnTPM .
Esta tarjeta en manos de los valientes patriotas sin carnet que le dieron independencia a la patria a punta de pensamiento, lanza y espada, seguramente pudrian haber atravesado los andes con más presteza y menos bajas de haber poseído tal instrumento de purificación.
Quizás Ali Primera habría tenido un mayor compromiso con Venezuela sus hombres, mujeres y niños de haber tenido ese Canet que le pudo haber dado la suficiente solvencia oficial para representar de mejor manera a los desconocidos por el oficialismo de la época que le toco vivir, Simón Díaz hubiera compuesto piezas más representativas, María Lionza se le adjudicarían más milagros.
Lo dramático es que las cosas no llegan a tiempo e imagino que ya el imperialismo y sus lacayos estarán planificando como evitar que llegue el dichoso plástico a manos de los millones de los que habla Elías Jaua en su último artículo en APORREA Elias ese que hace uso y abuso de Malraux para sus darle de oxígeno a sus flatulentas arengas: No empezaremos de cero, una amplia vanguardia popular contada en millones de hombres y mujeres ha demostrado ser portadora de una fuerza moral y espiritual. Me refiero al liderazgo político, popular, militar, religioso, juvenil y trabajador que no extorsionó, ni corrompió a nadie, ni se dejó corromper y optó por la lucha, el trabajo y la solidaridad por el prójimo, levantando en alto la condición humana. http://www.aporrea.org/actualidad/a239638.html
Ahora a esperar las cosas mejoraran, se acabaran los corruptos, nos gobernaran a los que elegimos, el nepotismo y el compadrazgo serán cosas del pasado, y aparecerá con vida Alcedo Mora y las cárceles serán para reformar al individuo y no para castigarlos hasta la ignominia…
Quizás también ocurra como con la tarjeta mi negra, muchas repartidas y muchos menos votos que tarjetas entregadas, así es la vida.
La patria es otra cosa entre otras muchas cosas o por lo menos no es el carnet que te entregaran como condones en las campañas de salud sexual…
