Es un simple ejercicio mental para los autores materiales e intelectuales de la oposición internacional y nacional contra el gobierno del compañero Presidente Nicolás Maduro.
Comenzamos desde el más grande al más pequeño o como quiera que lo pongan;
Supongamos que una manifestación de la oposición a Donald Trump, Macri, Juan Manuel Santos, Enrique Peña Nieto, al gobierno forajido de Temer o al "jarrón chino" de la OEA concluye con el asesinato de uno, diez, cien, mil, para ellos no importa el numero mientras no tocan su sangre, pero seamos más radicales en la comparación e imaginemos que entre los muertos hay familiares de algunos de los personajes "tristemente" celebres antes mencionados.
En un supuesto como estos, imaginemos que desde Venezuela, Bolivia, Ecuador, Rusia y Cuba; expresáramos solidaridad mecánica hacia los terroristas y les exigiéramos a estos gobiernos la liberación inmediata de "los presos políticos" que le mataron algún familiar al presidente o al zapatero del barrio.
De lo antes expuesto, que nadie quiere que ocurra, ha ocurrido y está ocurriendo contra el pueblo y gobierno de Venezuela.
Pero vamos mas allá de las cabezas visibles del cinismo y la mentira que difunden CNN, TELEVISA, El Clarín, Caracol, O Globo que tal vez opinarían distinto si entre los muertos de estos grupos terroristas estuviera algún familiar de ellos, nadie lo desea pero es lógico pensar que harían si fuera al revés el asunto.
Me refiero al solidario mecánico de a pie, a quienes acompañan a la señora Tintori en su locura mitómana de decirle al mundo que Leopoldo es "un preso político" cuando la verdad es que es un POLITICO PRESO por terrorista y asesino, la gente que apoya a los familiares de los políticos presos deberían colocarse aunque sea por un instante en el lugar de la mujer que perdió al marido en la guarimba, a los niños que quedaron sin padres o a los padres que perdieron los hijos, deberían imaginar qué pensarían, dirían o harían, si la vaina fuera al revés y en lugar de una guarimba terrorista de la derecha, fuéramos los chavistas los que cometemos esos actos y los muertos fueran de ustedes.
Solo imaginemos que el señor arrastrado de la secretaria general de la OEA hubiese perdido un hijo o una hija en la guarimba de Leopoldo López y compañía.
No queremos ni lo uno ni lo otro pero tampoco podemos aceptar que gobiernos como los de Estados Unidos, Colombia, Brasil, México, España, Panamá y mucho menos, "don gato y su pandilla" así llama el pueblo argentino a Macri, nos vengan a dar consejos sobre derechos humanos y garantías democráticas que ellos mismos no les ofrecen a sus pueblos.
Desde el PPT estamos activados en la Defensa de nuestra Constitución y el Presidente Maduro por encima de lo difícil e imposible.
Si vienen con un 11 los esperamos con un 13 pero esta vez no vamos a bezar la cruz y tampoco habrá impunidad, sean del tamaño que sean.
¡Hasta la Victoria Siempre!