De verdad que esta guerra económica es tan atípica, como inusual es la conducta de este pueblo que por siglos ha demostrado que no se cae a coba con nadie.
No se caló a los españoles, menos a los ingleses y a los gringos se la cantó clarito cuando vino a Venezuela su presidente NIXON, por lo tanto no entiendo cómo es eso que ahora, portugueses, españoles, chinos, árabes y colombianos dedicados al "comercio", nos estén tomando por pendejos, subiendo los precios de los alimentos en nuestras propias narices, con cuyos precios nos están robando los beneficios complementarios que estamos recibiendo del Presidente NICOLÁS MADURO, y casi sacamos en hombros a dichos "comerciantes" en agradecimiento por tan loable labor social que están haciendo en joder a nuestro pueblo.
Viendo este comportamiento de este pueblo bravío, llegó a pensar que de la misma forma que le inocularon la enfermedad incurable con la que asesinaron al comandante Chávez, nuestros enemigos encontraron la forma para inocular el espíritu rebelde de nuestra gente, a tal punto que vea como normal todas las agresiones de que estamos siendo objeto, tanto de fuera como a lo interno y no reaccionemos en la misma proporción a la dosis de guerra no convencional que nos están aplicando. En este 1 de Mayo no vi una sola consigna "CONTRA EL ALTO COSTO DE LA VIDA" " CÁRCEL PARA LOS USUREROS Y HAMBREADORES DEL PUEBLO" Dice el refrán " EL QUE CALLA OTORGA"
Al margen de la carga de ironía que lleva este artículo, voy a incorporar el texto de uno de mis primeros artículos que escribí en Aporrea en el año 2013, en el cual ya mostraba mi preocupación y alertaba al gobierno sobre el tema de la ESPECULACIÓN que se estaba incubando en la mente de los llamados "Comerciantes", como parte de un plan a largo plazo que sectores de la oligarquía estaban planificando para aplicarlo al proyecto bolivariano.
Sin el poder popular el gobierno no le gana la batalla a la especulación.