"Estábamos abstraídos ausentes del universo en cuanto era relativo a la ciencia del Gobierno (…) por el engaño se nos ha dominado más que por la fuerza; y por el vicio se nos ha degradado más bien que por la superstición. La esclavitud es la hija de las tinieblas; un pueblo ignorante es un instrumento ciego se su propia destrucción; la ambición, la intriga, abusan de la credulidad y de la inexperiencia de hombres ajenos de todo conocimiento político, económico o civil: adoptan como realidades las que son puras ilusiones; toman la licencia por la libertad, la traición por el patriotismo, la venganza por la justicia" (1)
Estos tiempos venezolanos de muchas dificultades en nuestro discurrir cotidiano, cada vez más nos exige mirar hacia el pasado, sin obviar el mundo que nos rodea, con el cual estamos ligados hasta los tuétanos. Posiblemente, en esas antiguas experiencias encontraremos las claves de nuestro acontecer. No se trata de una ociosa tarea de desocupados, ni búsquedas para entretener; sólo que en atascos como en el que estamos, no va a quedar otra alternativa, que una revisión implacable de nuestras "Circunstancias históricas".
En estos días un grupo de notables intelectuales expresaron en este mismo portal sus ideas sobre la cualidad de la "Venezuela Potencia". No sé, si es un vocablo adecuado, pero lo que si se, es que este es, un país de inmensas posibilidades, muy rico, pero "muy ignorado" por unos cuantos de nosotros, y bastante conocido por poderosas naciones.(Geografía, subsuelo, recursos diversos, cultura, etc) Esto nos recuerda a aquella expresión atribuida a Engels, de "Clase en sí, en Clase para sí" en relación a la necesaria formación de una conciencia clasista en el proletariado, lo otro sería simples luchas reivindicativas, economicistas, estériles, atendiendo el ritmo que el capitalismo plantea y necesita ¿No será acaso un país Potencia aquel donde ejerzamos la titularidad, no solamente política sino económica e integremos la dimensión histórica en los problemas económicos?
Hace apenas treinta años en un recorrido de indagación cultural que me llevó desde Macuro-Güiria de la Costa, hasta Ureña y desde San Román hasta Puerto Ayacucho, relacionándome con lo que en el lenguaje político-económico se viene definiendo como "país potencia".
En San Antonio Del Golfo, un joven pescaba unas inmensas "Lisas azules", y me confesó que allí habían "como arroz"; luego un poco más lejos en el occidente, llegando a los Puertos de Altagracia en la costa este del Lago de Maracaibo, una poblada armada con palos atrapaba peces que se habían quedado "varados "en unos matorrales a la orilla de la carretera como consecuencia del desbordamiento lacustre.
En el Rio Apure en San Fernando, me acerqué a ver la pesca de la Cachama, los pescadores me hablaron de ejemplares de más de veinte kilos y, en las cercanías de Puerto Ayacucho observé unos gigantes peces llamados "Valentones" que unos jóvenes vendían en una carretilla; y a muchos kilómetros aguas abajo en el Orinoco, en el mercado de la Carioca en ciudad Bolívar, la variedad de peces de agua dulce era sorprendente; así como abundante era la oferta de pescados a buena distancia de allí, en el noreste del país, en el mercado a cielo abierto del Morro de Puerto Santo, después de Carupano vía Rio Caribe. Y todo esto fue una rápida visión en un año apenas. Ese viaje y otros me llevaron a entender el sentido de las Cornucopias del Escudo y los poemas de Andrés Bello y Lazo Martí.¡¡Qué país!!¿Un país Potencia?
Antes de la independencia política americana estos territorios, fueron visitados y estudiados sistemáticamente por exploradores y científicos diversos , entre ellos uno muy conocido por todos nosotros el barón Alejandro de Humboldt de origen alemán, quien a fines del siglo XVIII y comienzos del XIX, recorrió una sustancial parte de la Capitanía General de Venezuela. Todos ellos acopiaron abundante y relevante información con las cuales nutrieron los centros de poder científicos, económicos y políticos de las Metrópolis.
Alemania tempranamente en el siglo XVI se había vinculado a esta porción de la América, gracias a la relación entre los Welser y Carlos V emperador del Sacro imperio romano germánico y rey de España. Aquella intervención teutona por estos lados fue oscura, posiblemente hubo más interés depredador que colonizador, al final esta relación terminó muy mal con la casa de sus mandantes los Habsburgo.
Pero el capitalismo alemán, igualmente INSOMNE, en la segunda mitad del siglo XIX, en el despliegue exportador de las potencias europeas, amarró muy buenos contratos en Venezuela, entre otras cosas en el negocio ferrocarrilero; más tarde, junto al Reino Unido, Italia y otros, sería uno de los fieros protagonistas de reclamos de deudas a la nación venezolana, que los llevaron a agredirnos (hundimiento de buques venezolanos y bombardeos de las fortalezas de Puerto Cabello , la guaira y San Carlos (Zulia) y bloqueo de la fachada caribeña venezolana a partir de 1902, durante el gobierno de Cipriano Castro.
Mientras esto ocurría se hizo presente el que sería el gran INSOMNE que ya empezaba a tener dominio planetario: Filipinas, Cuba, Puerto Rico, Guam, pero, un poco antes había reforzado su "Espacio vital" a expensas de su vecino México, ahora provechaba tal situación para reafirmar su carácter de "Protector del Hemisferio", sustentado en la Doctrina Monroe. Desde ese entonces este gran INSOMNE, ha sido una permanente sombra, pendiente de todos nuestros movimientos económicos y políticos.
Pero como sabemos, la humanidad cual artesana no cesa de tejer y, de nuevo los alemanes se presentan en la historia, ahora de toda la humanidad, pero esta vez con otra intencionalidad, me refiero a Carlos Marx y Federico Engels, que durante un buen trecho del Siglo XIX, se ocuparon de lo que se llamó las Ciencias Sociales, intentando comprender ¿cómo viven y se relacionan las sociedades humanas, como producen, y como se reparten lo producido? y ¡Oh sorpresa! Estas investigaciones los llevaron a desentrañar las complejidades de las relaciones humanas desde los más remotos tiempos.
La verdad que eso fue un verdadero desnudo histórico que estos hombres nos legaron y que está allí esperando todos los abordajes que los hombres y mujeres sensibles y pensantes puedan hacer e imaginar. Los "ismos" colocados al Capital y a lo Social, que en su momento abrieron amplios horizontes interpretativos, están hoy presentes de manera muy viva en la vida de todos nuestros pueblos, en diversos niveles y gradaciones; en sociedades que se caen y levantan, que se deshilachan y se recomponen, que andan en sus búsquedas aunque parezcan solo utopías.
El aporte de estos teóricos y militantes sociales ha sido inestimable, no solamente por lo estudioso que fueron de los filósofos de su tiempo y de los más ilustres economistas de la Revolución Industrial, sino que además fueron testigos de excepción, pudiendo palpar el desarrollo del capitalismo y sus depresiones periódicas, al instalarse a vivir en el Reino Unido (Londres) en un tiempo en que esa sociedad experimentaba un formidable desarrollo de las fuerzas productivas que les permitió crecer y extenderse como potencia capitalista exportadora de bienes de consumo y de capital a los países de la periferia Asia y América.
La tarea humana de comprender y cambiar sigue pendiente, el Capitalismo sigue allí, retador, atento, actuando, y el Socialismo a pesar de los taparazos seguirá bregando sus espacios de humanidad.
La otra cosa que hay que revisar son los repositorios donde se acumulan los saberes técnicos, científicos e intelectuales (Instituciones públicas y privadas, Centros de Investigación) ¿Cuanto conocimiento útil habrá por allí archivado y enmohecido, en un país con tanta necesidad de ciencia, técnica e ideas?
CARLOS MARX 200 AÑOS DE JUVENTUD INTELECTUAL.
LA REVOLUCIÓN ES CULTURAL
Rafael Castro
(1).-Bolívar, Simón/Congreso de Angostura, 15-02-1819/Doctrina del Libertador/págs. 123, 124/Biblioteca Ayacucho/Caracas 1985.