En el 1er. Conversatorio de América Latina y el Caribe, inaugurado en Santiago de Chile el 30 de Noviembre 2018, organizado por la Unicef y la Cepal, se confirmó que el capitalismo salvaje de EE UU es el agente 007 con licencia mundial para matar. Lo dejó en evidencia elocuente y asertiva, Larry Devoe secretario del Consejo de Derechos Humanos de Venezuela.
La denuncia venezolana desnuda medidas coercitivas impuestas por el régimen gringo contra nuestra nación, y su impacto letal en niños y adolescentes víctimas del bloqueo comercial, impuesto ilegalmente por el gobierno de Donald Trump, que impide a la nación bolivariana importar en dólares alimentos, medicinas e insumos básicos para la sociedad, que ahora negociamos en petros.
El bloqueo financiero ha ocasionado la pérdida de más de 20 millones de dólares, por la necesidad de realizar operaciones de cambio de divisas, ante la prohibición de utilizar el dólar imperialista como medio de pago. El monto equivale al tratamiento del SIDA para 60 mil pacientes durante un año, incluidos niños, niñas y adolescentes.
Al agente 007 no le importa que su licencia salvaje impida transferir recursos a organismos internacionales por vacunas y medicamentos, atentando contra el desarrollo de nuestro país donde el gobierno destina más del 70% del presupuesto a inversión social, 54% a la niñez y adolescencia, y más 6 millones de hogares que reciben asignaciones gracias al Carnet de la Patria. Obvia diferencia con las administraciones de la disimulócrata democracia representativa.
