Produce grima ver cuán bajo ha caído el periodismo de opinión, en forma de dudosas reseñas político-noticiosas, dando coces al periodismo profesional. Vi, y por supuesto leí, cuatro versiones de una noticia acerca del asesinato de una venezolana en Costa Rica. Los redactores o mejor digo "los manipuladores", la presentaron con algo de satisfacción canallesca fúnebre, mencionando a "una migrante que se había ido en busca de un mejor destino que se lo niega el modelo socialista venezolano". La noticia real es la que a continuación comento.
Venezolana asesinada brutalmente y abandonada en una zona rural costarricense. "Ella creía que Costa Rica era un país seguro y miren que ironía, en este país encontró la muerte" dijo su padre al reconocer el cadáver, y agregó "yo no sé si el Gobierno de Costa Rica entiende la repercusión que puede tener la muerte de Carlita, porque este país vive del turismo". La prensa tica indicó que la investigación policial apunta al móvil de un ataque sexual. Un hombre identificado como Bismarck Espinoza, nicaragüense de 32 años, es el principal sospechoso y está detenido.
En detalles se supo que la víctima arribó el 22 de noviembre, seis días después debía regresar a Miami donde vivía, al no volver ni contestar mensajes a sus familiares, la reportaron desaparecida. "Ella creía que Costa Rica era un país seguro y miren que ironía, encontró la muerte" indicó Carlos Caicedo padre de Carla Stefaniak, venezolana-estadounidense de 36 años, que viajó a vacacionar a Costa Rica desde La Florida. Repito, no vivía en Venezuela.
En este como en muchos aspectos desinformativos viles, se unen las paparruchas periodísticas a los intereses del capitalismo salvaje contra el proceso socialista en Venezuela, aterrorizando a la población víctima de la desazón que provoca la guerra económica, el boicot financiero y la desaparición inducida de: alimentos, medicinas, y productos de todo tipo, haciéndonos la vida imposible con influencia letal a los desinformados, que con indiferencia e ignorancia replican las redes opositoras hegemónicas, en el afán de expulsar a Nicolás Maduro y el socialismo siglo XXI.