Venezuela firmó con Rusia contratos para garantizar inversiones energéticas, petroleras, alimenticias, tecnológicas y de sistemas de armas, lo anunció en su momento el Presidente Nicolás Maduro, haciendo también referencia a la necesidad de una canasta internacional de monedas y criptomonedas diferentes al dólar, para la comercialización del crudo y sus derivados. El Jefe de Estado venezolano manifestó "toda la producción petrolera de Venezuela va a venderse en petros en el 2019". De inmediato economistas mariscales de los desaciertos en predicciones acerca de Venezuela, que durante años han anunciado fastidiosamente el default de la revolución bolivariana, desvergonzados erráticos adoradores de USA, que en el exterior chantajean a los gringos y mendigan dólares, salieron a defender su pitiyanquismo, pues se niegan a entender la economía siglo XXI, enemigos como son del petro nacional que los mortifica.
La "sesera" no les da para comprender que Venezuela solo desea -y es un deber soberano-, liberarnos de una moneda que utiliza la élite de Washington para chantajear, agredir pueblos del mundo entero, y hacernos daño económico, algo que está a la vista del mundo con intervenciones armadas, encabezadas por los Bush, Obama, la "diplomática" Hilary Clinton y el desquiciado Donald Trump. En definitiva es una posición estratégica de administraciones europeas confesas capitalistas, pero cansadas de la abusocracia made in USA. Países donde sus presidentes aun siendo social demócratas y social cristianos socios seguros, no ocultan disgusto con el imperialismo estadounidense guerrerista y depredador presidido por Trump, y preparan la expulsión del dólar en ciertas transacciones. Ya es costumbre que la Venezuela socialista dicte pauta soberana por adelantado, razón por la que nos atacan ferozmente.