Ya en el pasado mes de septiembre, en un artículo titulado "Vientos y Tambores de Guerra" trataba muy prudentemente la posibilidad no tan remota de una intervención militar en nuestro territorio, la cual parecía más cercana de lo que pudiera pensarse por las constantes amenazas lanzadas por el Secretario de Estado Mike Pompeo y el Vicepresidente Mike Pence, sobre la necesidad de intervenir en la díscola Venezuela, que continuaba adelante con sus programas políticos y de recuperación contra la guerra económica adelantada desde los Estados Unidos hacia nuestra economía, al igual que entrabando nuestras finanzas, con una serie de acciones extraterritoriales, con las cuales amenazan en principio a sus propias empresas con diferentes medidas punitivas si mantenían relaciones comerciales con empresas o el gobierno venezolano, no solamente para las compañías sitas en su territorio continental, sino también las off shore establecidas en otros países, sino que por añadidura, presionaban y presionan a países con los cuales tienen relaciones comerciales, a limitar y si posible cortar definitivamente cualquier transacción tanto comercial o financiera con la República Bolivariana de Venezuela para obligarla a rendirse a sus designios y aspiraciones hegemónicas.
Con grandes escaseces a lo interno, habiéndonos limitado gravemente la posibilidad de adquirir alimentos y medicinas que no producimos y que necesariamente debemos importar, nos han creado una crisis, que a pesar del gran esfuerzo realizado no hemos podido superar, pero sí hemos logrado palear y con el estoicismos de nuestra población más afectada, la de niveles bajos, que soslayando la incapacidad del gobierno para controlar los precios, se ha mantenido firme en el apoyo a Venezuela y su gobierno en la terrible encrucijada en la cual nos encontramos, ratificaron su apoyo a Maduro, a pesar de su queja al respecto, con la aplastante demostración de proporcionada en las recientes elecciones de Concejos Municipales.
Hago referencia a esta circunstancia por el relevante hecho, que significa la afirmación publica de ese personaje siniestro de la política estadounidense, John Bolton, Consejero de Seguridad, asesor de la Casa Blanca, muy presente con sus opiniones belicistas en las intervenciones norteamericanas en Libia, Afganistán, Iraq y Siria, como preludio a las intervenciones en los citados países y que ahora ha realizado declaraciones referentes al hecho de que, como las medidas de cerco económico y financiero no han dado a la fecha los resultados esperados, reconociendo que han apretado, pero no han provocado el colapso y la caída de Maduro, es necesario recurrir a la acción directa, para buen entendedor, la intervención militar.
Ese plan de intervenir en Venezuela no es nuevo, se inició aun antes de la elección de Hugo Chávez a la presidencia de la República participando activamente en su campaña presidencial, aportando ingentes recursos financieros a los factores de oposición pero, que no dieron resultado por lo cual resolvieron participar en el Golpe del 2002; todos deben recordar la presencia de fuerzas armadas de Estados Unidos, (marines) en fuerte Tiuna el día de la fallida intentona de Pedro Carmona Estanga y la muy mentada presencia de la 4ª flota frente al puerto de La Guaira e inclusive se rumoró, el desembarco de algunos contingentes en el Aeropuerto de Maiquetía, que luego se retiraron por el fracaso de la acción golpista.
Es conveniente recordar que la práctica más moderna que utiliza el Imperio en sus intervenciones con mira a controlar gobiernos en otros países la ha variado y se ha acogido a lo recomendado por Gene Sharp, y su golpe suave continuado, política de desestabilización constante que nos han aplicado no sólo por la guerra económica-financiera, sino por actos de convulsión interna promoviendo huelgas sin razones laborales que las justifiquen, campañas de rumores que produzcan desasosiego e intranquilidad en la población, llegando a la acción directa con la promoción y financiamiento de las malhadadas guarimbas con su secuela de muertos y destrucción física y por las informaciones que están surgiendo, pareciera que subsiste una duda sobre la forma de actuar contra las instituciones venezolanas, el golpe de fuerza promovido desde afuera con colaboración interna o la intervención militar propiamente dicha en territorio venezolano, para lo cual parece que estarían preparando mercenarios en Colombia.
No cabe la menor duda de que la intervención del Presidente ayer 12 de diciembre para la cual convocó una Rueda de Prensa tanto nacional como internacional, y por la precisión aportada en la misma, sobre los planes de intervención en Venezuela, de la cual acusó directamente a siniestro John Bolton, precursor de acciones bélicas e invasiones especialmente en Oriente Medio y recordando lo que siempre debemos tener presente, que este "caballero" porque de alguna manera hay que llamarlo, ha sido el más contundente propiciador de la intervención militar en Venezuela, la cual ha promovido sin ambages de ningún tipo, y como quiera que es asesor de la Casa Blanca, sus amenazas, no podemos ignorarlas, porque si públicamente presiona para que se tomen acciones militares contra Venezuela, que esfuerzo no realizará a puertas cerradas con el Presidente Trump, para alcanzar su máxima aspiración personal que es la iniciación de una intervención armada, ahora en Venezuela,
Lo complicado de la situación y la seriedad de la información que estaba suministrando al Mundo Entero a través de los periodistas internacionales asistentes a la Rueda de Prensa, el Presidente Maduro, lo reflejan su adusto rostro, sin evasivas o rodeos de ningún tipo respecto a la materia que estaba tratando, así como la contundencia con la cual precisó el lugar donde se estaban entrenando 740 mercenarios venezolanos y colombianos a 130 km. de Chinácota Norte de Santander y otro contingente en la base estadounidense en Tolemaida, Colombia con miras a intervenir en varias de nuestras instalaciones militares con acciones que se presumen tipo comando. Oyendo entre palabras, el Presidente nos insinuó que es necesario estar prepararos física económica militar y mentalmente, contra una no sólo posible sino ahora probable agresión en vista del entrenamiento, que le están dando a mercenarios cerca de nuestra frontera coombiana quizá haciendo realidad la amenaza de Uribe Vélez y la esperanza Pompeo, Pence, Trump y especialmente Bolton.
La acción golpista o la intervención militar debe considerarse seriamente porque el gobierno de Duque no desmintió contundentemente, que fue en Colombia donde se entrenaron los terroristas del fallido magnicidio, e inclusive no desmintió que fue un cooperante del servicio de inteligencia colombiano, quien habría facilitado la movilización internacional de los complotados.
Quizá Iván Duque que se apresuró a informar que las acusaciones de Maduro sobre entrenamiento en territorio colombiano de mercenarios no eran ciertas, es posible que en esta oportunidad sean sinceras, pero también es probable que los mismos se realicen sin su conocimiento, porque John Bolton no le va a pedir permiso para actuar desde sus bases en Colombia, cuando es harto conocido que las mismas tienen garantía de extraterritorialidad y el personal militar estadounidense tiene algo similar a inmunidad diplomática, al punto de que no pueden ser procesados por delitos cometidos en Colombia tales como violaciones (van varias) y hasta asesinatos, en consecuencia el gobierno colombiano no puede intervenir unilateralmente en dichas bases.
No podemos creerle al Presidente Duque, que no tengan ninguna mala intención militar y golpista contra Venezuela y su gobierno porque contantemente hablan de que en Venezuela impera una dictadura y que es necesario eliminarla y ¿cómo? Presidente la eliminaría Ud. Y además es necesario siempre recordar que aunque lo niegue, sabe y reconoce que es un títere de Uribe Vélez y que éste clara y pomposamente declaró que "No ataqué a Venezuela por falta de tiempo no por falta deseo" y esa es y sigue siendo la posición de su Jefe.
El temor del Presidente de que pudiera fraguarse un atentado contra su vida está plenamente justificado, porque ya le realizaron uno fallido por poco; los autores materiales están convictos y confesos, los intelectuales, según han identificado los materiales, están unos protegidos por el gobierno colombiano y otros por el gobierno de los Estados Unidos, para quienes hay terrorismo bueno, el que ellos propician y malo el que pueda venir de otros. Debemos recordar que el pastor Pat Coverdale proponía que era mejor y más barato eliminar al presidente de Venezuela (Hugo Chávez) que otras medidas incluyendo la intervención armada y debemos tener presente que el asesinato político es conducta muy gringa y les recuerdo a; Abrahan Lincoln, John F Kennedy, Robert F. Kennedy, Martin Luther King o Malcon X que fueron asesinados por política y la opinión del general Colin Powell quien ante una pregunta sobre su aspiración a la presidencia contestó " no quiero terminar como los Kennedy o Martin Luther King, y que a Fidel Castro, según documentos desclasificados de la CIA le realizaron más de 600 intentonas para asesinarlo; Por qué no puede pensarse, que en la guerra contra Venezuela, que adelanta Estados Unidos y que encabeza un psicópata como John Bolton, no se pueda pensar en un intento de magnicidio, contra Maduro y se piense en paranoia, cuando subsisten graves reservas sobre el "cáncer" de Chávez por haberse tratado de una afección neoplásica completamente desconocida y nueva en la medicina según laboratorios de anatomía patológica de muchos países, incluyendo de los Estados Unidos.