Para mí la principal causa de nuestra crisis institucional, es la insubordinación de la Asamblea Nacional, uno de los poderes que constituyen el Estado, saltándose a la torera lo dispuesto en la Constitución y aunque agrede al poder ejecutivo al arrogarse atribuciones parte de sus funciones y desconocer al legítimo Presidente Nicolás Maduro, pudiéramos calificarla a falta de otro calificativo de "supraconstitucional", porque atropellan la Constitución a sabiendas, siempre buscando la señal de su mánager desde el Norte, por algo que parece ser más que una malacrianza y que con ese ensayo tanto nacional como internacional, se pretenda calibrar la resistencia del las instituciones y la decisión que se tenga de enfrentar el problema causado por la autodesignación de un presidente, la cual viene a ser además de una grave falta legal, una amenaza flagrante contra el Gobierno legítimamente constituido que se inició el 20/05/18 con la elección presidencial adelantada, tantas veces solicitada por la dirigencia opositora, dentro del período establecido en la propia constitución y asumiendo tal fecha como impostergable, por haberse convenido en República Dominicana, respetando casi que por casualidad, conforme a lo establecido, que debía realizarse en el año inmediatamente anterior al vencimiento de período en ejercicio, lo que deja absoluta claridad respecto a lo ajustado a las disposiciones electorales para designar presidente, no obstante haberse adelantado, de todas formas estaba como dijéramos dentro del marco legal. vigente.
Se convoca a una Asamblea Constituyente para superar el estado anárquico que se venía instaurando con la proliferación incontrolada de las guarimbas; el sólo resultado casi por arte de magia terminó con la violencia callejera, y aquietó la guirisapa que a menudo se apoderaba de la AN al reconocer aunque de labios a fuera, algunas opiniones adversas sabían que reconocían que sus días de escándalos y altisonancia política estarían llegando a su fin, por las incongruencia de 2 cuerpos legislativos paralelos contravenidos en sus principios y acciones, máxime con los poderes plenipotenciarios absolutamente indiscutibles que se derivan del Art. 349 de la Constitución que, le permitía a la recién designada Asamblea Nacional Constituyente, asumir de pleno derecho todas las actividades legislativas y de control de la AN que, además se encontraba tal como hoy y que ha sido suficientemente comprobado, en flagrante desacato.
Muchos nos preguntamos por qué no se procedió como la mayoría de los venezolanos que reconocíamos que uno de los principales problemas administrativos del País lo constituía la AN en rebeldía y en ilegal desacato y que su comportamiento anárquico perturbaba el desenvolvimiento de las actividades administrativas y políticas. Craso error imperdonable de los dirigentes del partido de gobierno y del Gobierno al no asumir con tiempo a la distancia que, tal lenidad traería graves consecuencias al País; ahora ante un panorama francamente adverso, con grandes potencias interviniendo directamente en nuestros asuntos internos, como el caso del todopoderoso Estados Unidos, que heridos en su orgullo por un irreverente pequeño país que, no se ha doblegado a sus designios y que se ha negado a seguir siendo perrito a su mandar echado en las alfombras de Miraflores, dueño de una gallina de huevos de oro, que en justicia está dispuesto a compartir con el resto del mundo, dentro de las leyes internacionales de explotación y comercio y de ninguna manera entregarlas por imposición del todopoderoso imperio que la quiere para sí; desgraciadamente apoyados internamente por apátridas que se venden por un plato de lentejas y un recién aparecido en el teatro político que, cree todo lo que le dicen Mike Pence, Mike Ponpeo o el mismo Donald Trump, aupado en sus mentales desvaríos por personajes como Iván Duque, Jair Bolsonaro y hasta el mismo presidente de Argentina Mauricio Macri que lo han ensalsado tanto que se ha autoconvencido de que será el próximo presidente de Venezuela y un héroe venerado en el mundo especialmente en EEUU. Creo que el Sr. Guaidó esta embelesado en un sueño que quizá desaparecerá luego de algunas semana de alabanzas y falsas ilusiones, para casi seguramente caer en la papelera del olvido como un gran tonto que ni útil pudo ser.
Desengáñese compadre que no hay angelitos sin alas como es su caso, que a duras penas, actuará como ciego siguiendo el garrote que le tienden para que camine en la dirección que lo halen y al final lo van a halar desde el otro lado de la barranca y al caer al vacío ya no se acordarán de Ud, especialmente si el Estado Venezolano en cumplimiento de su principal obligación que es mantener el funcionamiento de las instituciones, lo somete a juicio mediante intervención del Ministerio Público que, está en la obligación no sólo por denuncia, sino por "notitia criminis" de enjuiciar a un usurpador nada más ni nada menos que de la Primera Magistratura Nacional, pretensión que basa en haber sido designado Presidente de una Asamblea en acto írrito por el desacato en el cual se encuentra y que para completarlo se autodenominó presidente de Venezuela en un mitinesco acto el 23/01/2019, creando la inusitada situación de un supuesto gobierno paralelo, lo cual constituye sin lugar a dudas una gravísima falta a la Constitución y a la estabilidad nacional, al buscar reconocimiento de gobiernos extranjeros a su falsa posición de presidente de Venezuela, posiblemente con la intención de cobrar a nombre de la República las acreencias que a nuestro favor tenemos en varios países del mundo que, lo sobornarán con algunos millones de dólares, y quizá apoyándose en esa actitud además de estúpida, antipatriota del presidente autonombrado, tomar para ellos como hicieron con las reservas internacionales de Libia y que algunos países filibusteros piensan que aprovechando el caos que está creando la intentona de administración paralela de Sr. Guaidó, pretendan desconocer al gobierno legítimo de Maduro y apoderarse de nuestros haberes, consistentes en nuestras reservas internacionales en divisas convertibles y oro depositados en bancos del exterior de supuesta gran solidez económica y moral, nuestras millonarias acreencias por préstamos y ventas, especialmente de petróleo como el caso del Paraguay y el propio Estados Unidos, nuestros activos fijos constituidos en su gran mayoría por las refinerías de Citgo en los Estados Unidos que también peligran.
La actitud pasiva del gobierno y los cuerpos judiciales ante el atentado contra nuestra soberanía y la real amenaza de la AN encabezada por el Sr.Guaidó al crear un gobierno paralelo, cuando debieron actuar sin demora ni dudas; un poco tarde pero quizá con algo de tiempo actuando de inmediato dentro del marco lento de las leyes, pero tan pronto como posible, porque seguirán las amenazas que comprometan a nuevos países contra Venezuela, que por declaraciones, por la palabra auto empeñada y en connivencia con otros adláteres, adquieran cada vez más compromisos internacionales anti venezolanos y complique cada vez más nuestra enrarecida situación.
El no haber actuado con la celeridad por el problema planteado en la Asamblea Nacional en Desacato asunto que, debió resolverse hace ya mucho tiempo, y el retardo en tomar medidas contra la situación que se planteó de nuevo con la designación del Sr, Guaidó como presidente, ahora nos colocan entre la espada y la pared, ya que nuestras reservas internacionales están en manos de gobiernos que pretenden reconocer al gobierno paralelo y en consecuencia no dispondríamos de las divisas que están a la orden de los piratas de las finanzas internacionales y pudieran adueñárselas, complicándonos las posibilidades de importar alimentos y medicinas.
Cuando el gobierno de EEUU resolvió no entregarnos nuestros dólares ni tan siquiera para cancelar compras de medicinas y vacunas realizadas a empresas estadounidenses, debió tomarse tal actitud como una campanada y no permitir que cosas similares se repitieran o se produjeran en otros gobiernos como el del Reino Unido que, de manera unilateral y contra toda norma, resolvió retener nuestro oro depositado en el Banco de Inglaterra, y se ve la intención de adueñárselo, porque en Venezuela según ellos en su interés pirata, existe una dictadura. Es momento de recordar que Inglaterra nunca devolvió ni a la URSS ni a la Federación Rusa, el tesoro que guardaba de los Zares y que por consiguiente era de la Rusia Imperial y en consecuencia de la nación Rusa su sucesora y con la excusa de que ningún descendiente del Zar Nicolás II (todos asesinados por los bolcheviques) lo reclamó, se lo adueñó.
Actuemos de prisa, y quizá todavía tengamos éxito aunque sea parcial, no podemos esperar más, porque como próximas acciones pudieran estar estudiando más restricciones económicas, especialmente profundización de las FINANCIERAS con congelación y hasta incautación de bienes nacionales, ejerciendo mayor presión al gobierno de Maduro para que renuncie o en retaliación por la ruptura unilateral por parte de Venezuela de las relaciones diplomáticas y consulares o ante el fracaso del golpe de estado que, como está develado tiene pocas posibilidades de éxito.