Hace seis años te juramos lealtad. ¿Lo somos?

En momentos en que podríamos concluir que nuestra situación económica está hecha "una mierda", que el estado de bienestar social alcanzado con el gigante, hoy se difumina o se esconde entre las enormes restricciones económicas que padecemos, son pocos los que , aun sintiéndolo, salimos con la frente en alto portando y defendiendo los símbolos del chavismo, algunos por miedo, otros para evitar la confrontación infértil, otros rendidos ante el enemigo y prefieren volver al tiempo "en que creen haber sido felices y no lo sabían y otros que no quieren que los "confundan" con los causantes de "este desastre" ante la evidente contribución del burocratismo, la corrupción y la negligencia al daño que han podido hacer los privilegiados de siempre, internos y pro-imperialistas con su guerra total.

Chávez no solo labró el camino, nos impulsó en esa dirección, nos hizo saber vencedores, batalló con nosotros las primeras batallas, nos dejó herramientas ideológicas para continuar su lucha sino que se inmortalizó en nosotros, en nuestra dignidad, en la identidad con el ideario Bolivariano, Socialista y Antiimperialista. Ya Yo no soy yo, yo me encuentro encarnado en ustedes, yo soy un pueblo, yo soy tú hombre y mujer venezolana (…). Y aquel 8 de diciembre, que lloré como un niño al enterarme de tu despedida, de tu última proclama "Unidad, Lucha, Batalla y Victoria", juré como la mayoría de los chavistas defender su legado y serte leal hasta las últimas consecuencias.

Hoy a seis años de tu siembra, de tu transmutación a cada uno de nuestros corazones, bien mal quedaría aceptar que ya llegamos hasta" las últimas consecuencias", que nos rendimos por hambre y necesidades (como si nuestra historia no contara con mayores sacrificios por la liberación), que nos olvidamos de aquel juramento y salgamos esgrimiendo cualquier argumento (paja) para "saltar la talanquera" a la derecha, a la otra izquierda o a la "nada", seríamos unos traidores a nuestro juramento y unos falsos en esencia. El camino de confrontar al enemigo más poderoso de todos los tiempos, el que ha condensado la sabiduría acumulada en 15 mil años de explotación del hombre por el hombre (y la mujer) en las herramientas culturales y militares más catastróficas de la historia para defender y aumentar sus privilegios, es claro que seguirá siendo un camino de espinas, largo y tormentoso, pero es el camino y hay que transitarlo.

Por eso digo con orgullo y determinación, que sigo siendo feliz de haber acompañado al gigante, que estoy agradecido de haber vivido en tiempos de Chávez y que sigo dispuesto a llegar" hasta las últimas consecuencias" por continuar con su legado, que la guerra económica, psicológica y militar (o paramilitar) no me doblegará, que los errores cometidos no me rendirán sino que al contrario, viviré para corregirlos aunque parezca cuesta arriba y que me mantendré leal a mi juramento.

Nicolas no nos defraudes, oye sigue y lucha junto a tu pueblo y a Chávez, por liberarnos de los enemigos internos (Falsos camaradas corruptos) y de la derecha imperial, que nosotros seguiremos "Leales siempre, Traidores nunca".



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1325 veces.



Noel Peralta Barreto


Visite el perfil de Noel Peralta Barreto para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: