EL FRACASADO SOCIALISMO

Ahora, cuando se ha puesto en el tapete la discusión en torno al Socialismo que vamos a practicar y a teorizar en Venezuela, surge de nuevo un trajinado discurso que nos habla del “fracasado socialismo”. Que eso fracasó en el mundo y que cómo es posible que lo propongamos de nuevo, dicen sus detractores. Y sí, reconocemos que en algunas oportunidades fracasó. Y fracasó porque en buena medida los embates de los representantes del capitalismo salvaje, vendiendo espejismos -como siempre lo han hecho- a través de sus poderosos medios de comunicación y de las transnacionales de la desinformación, provocaron desviaciones que dieron al traste con esas experiencias. También se dieron casos en que el enemigo estuvo o se desarrolló adentro, minando el modelo, corrompiendo y desviando, y llevándolo al fracaso. Pero si contamos las veces en que “lo contrario”, lo opuesto al socialismo, lo que nos han dado y nos siguen ofreciendo, es decir, el capitalismo (cada vez más cobarde y más salvaje) ha fracasado... el número de fracasos se hace infinito. Para ello no tenemos que ir muy lejos. Acá mismo, en pocos años, en menos de veinticinco años, el capitalismo creó una pobreza que copó a más del 80 % de la población. Y esto se dio en uno de los países más ricos del planeta. ¿Qué queda entonces para los demás? Por eso les digo a los detractores: No es válido ese argumento del fracaso del socialismo en tres o cuatro oportunidades... porque ya no cabe en la pantalla de cualquier agenda electrónica el número de veces que el capitalismo ha fracasado. Y pronto veremos que, igualmente, fracasará estruendosamente en el país que hoy lo encabeza. Y desaparecerá definitivamente como opción para manejar una sociedad en términos de justicia y equidad.
ESCRIBE QUE ALGO QUEDA

Repetía Kotepa Delgado y no dejaba de tener razón. Iniciándose el año 2006 cuestionamos el hecho reiterado, año tras año, de aumentar cuasi-automáticamente el valor de la Unidad Tributaria, en la misma proporción en que el Banco Central determinaba el porcentaje en que había cerrado el índice de inflación el año anterior. Decía yo que el primer empujón que se le daba al proceso de crecimiento del índice de inflación en el año que comenzaba, se lo daba esta “convención” que -sin mucho justificarse- se establecía. Sigo pensando lo mismo y creo que el aumento permanente (y alegre) de la llamada Unidad Tributaria, se planta como un freno más (de todos los existentes) al desarrollo del país. Sobre todo en el plano microeconómico, que es donde más lo siente la población. Porque si bien es cierto que la novedosa modalidad de echar a andar una nueva economía a través de Cooperativas, y la constitución legal de este tipo de empresas no conlleva ningún costo en Registros Públicos, también es cierto que en un altísimo porcentaje, las Cooperativas que han logrado superar el inmenso andamiaje burocrático para “poder ser”, “poder existir”, no han funcionado. En parte porque no existe en el país un desarrollo suficiente de lo que se ha dado en llamar “Cultura cooperativa”, y, por otro lado, muchas más de las que han intentado constituirse, ni siquiera lo han logrado gracias a las trabas burocráticas que entraña crear una Cooperativa. Y es entonces que otro tipo de empresas (microempresas, pequeñas y medianas empresas), más conocidas en nuestro país, tampoco se crean, a pesar de las grandes facilidades financieras que ha creado el gobierno, por los altísimos costos que implica el hecho de registrarlas legalmente, ya que -por una parte- existe prácticamente un vacío legal en cuanto al manejo de Registros y Notarías en todo el país, que encarecen desmedidamente la creación de estas pequeñas empresas. Y uno de los medidores que más pesan a la hora de decidirse la discrecionalidad de los funcionarios que manejan estos entes de la administración pública, es precisamente la mentada Unidad Tributaria. Debería establecerse que la Unidad tributaria, como tope máximo, no debería superar la mitad del porcentaje del índice inflacionario con el que cerró el país el año anterior. Y si es menos, creo que sería mejor. Total las “metas” del Seniat, como a cada momento nos dicen, viven “superadas” en todos los tramos y casi desde que comienza el año. Vamos a ver si para el año que viene contribuyen drásticamente con la disminución del índice inflacionario desde el comienzo del año. Por otra parte, se producen “alegrías de tísico”, como aquellas de quienes piensan que al aumentar el monto de las U. T. aumentan los subsidios para la compra de viviendas, pero resulta que ese hecho también empuja hacia arriba los precios de las viviendas, presionando de forma importante al índice general de precios...

REPRODUCIENDO LO QUE -PARA MI- SON ERRORES

Siempre critiqué la confusión que los “coreógrafos” crean en países como el nuestro, con los bailes y danzas tradicionales de cada región. En la mayoría de los casos los homogeinizan, les “liman” sus características esenciales y, prácticamente, los acaban. Y crean confusión en los pobladores tierra adentro, quienes cuando observan “sus bailes” a través de la poderosa televisión, hasta llegan a creer que son así como aparecen en la pantalla, y no como son realmente, es decir, como ellos los bailan. El pasado lunes 15, a eso de las 3 de la tarde, pude observar el fenómeno, de nuevo, a través de nuestro canal Venezolana de Televisión. En un programa denominado “Los niños cantan y bailan”, apareció un grupo de niñas dizque bailando un joropo tipo coreografía Hollywood, acompañadas de otras niñas que hacían el papel de varones. Y para colmo, luego apareció un menudo cantante de unos diez años de edad, disfrazado de vaquero norteamericano, me imagino que a la usanza de lo sugerido como “moda” por la revista “Cowboy Fashion Magazine”. Lo único que lo “salvaba” era una especie de alpargatas de cuero-de-vaca, elaboradas -según dijo- en Villa de Cura. Para terminar de aderezar aquel enredo de programa, los dos animadores abusaron de los términos “vozarrón” y “gañote”, para elogiar las voces, por cierto bastante desafinadas, que oímos. Y entonces, pregunto: ¿Cuándo es que vamos a cambiar? ¿Seguiremos reproduciendo los bodrios que hacía la TV comercial con nuestras manifestaciones culturales? ¿O vamos, al fin, a mostrarle al país y al mundo, nuestros bailes y danzas de la manera auténtica como se exhiben en nuestras fiestas populares? ¿Es que no tuvieron ejemplo suficiente con el par de carajitos que bailaron joropo de verdad, el día en que el Presidente inauguró el tramo del Metro de Los Teques? Pues les cuento una cosa: Niños como ese par, existen de sobra en Venezuela...y buenos cantantes también. No repitan los errores de la Cuarta República hasta en eso. Que le hacen un flaco servicio a nuestra cultura…

NO SE CERRARÁ, SE ABRIRÁ

A pesar de que pongan en boca de tirios y troyanos, conceptos como cancelación, revocación, confiscación, restricción de la libertad de expresión y hasta cierre de una señal de televisión… va a ocurrir todo lo contrario. Gracias a que fenece el tiempo de una concesión, se va a abrir a la colectividad la señal de un canal televisivo, enmarcado dentro de un coto cerrado, usufructuado por una familia de las más poderosas del país, la que basada en ese control estricto de un canal de tanto poder informativo y comunicacional en general, se tuteaba con otros poderosos, y mediante chantajes y canonjías, vetos y “vistos-buenos”, omisiones y ocultamientos, propaganda y publicidad, verdades a medias y engaños a granel, etc., lograba alianzas económicas, financieras y hasta políticas, que los proveían de más poder aún, para -en medio de esa “grandiosidad” y de la impunidad que los rodeaba- engañar a la mayoría de pobladores del país, a quienes discriminaba y despreciaba. Por todo eso debemos tener claro que esa señal se va a abrir. No cabe decir que se va a cerrar cuando va a suceder todo lo contrario.

MENSAJE A FARRUCO Y A VIVIAN

La gente que labora en los Museos del Táchira y en la Fototeca del Táchira aún están esperando por el ofrecimiento que les hiciera Vivian Ribas, en su carácter de directora de la plataforma cultural liderada por el Instituto de las Artes de la Imagen y el Espacio. Ofrecieron pagar sus subvenciones antes de terminar el 2006, y ellos, confiados en la “palabra oficial”, hasta facilitaron dinero de sus propias limitaciones personales para que sus instituciones cerraran el año en gran forma. ¿Cómo quedamos?

OTROS QUE ESTÁN ESPERANDO Y NADA TODAVÍA

En este caso fue el propio Presidente Chávez quien empeñó su palabra. Pero la gente que trabajó en VIASA y que en poco o nada tuvo la culpa de la tragedia que significó privatizar esa empresa- bandera del país, por parte del desgobierno traidor de Pérez, aún está esperando por sus reivindicaciones laborales normales. Creo que de la misma forma en que nuestro gobierno ha indemnizado a ciudadanos por desmanes cometidos por gobiernos anteriores, y de la misma forma en que ha venido honrando pasivos laborales en otros sectores de la administración pública, debería igualmente pagarle a estos trabajadores que pusieron en alto el nombre de Venezuela durante tantos años transportando a propios y extraños. Más aún si está comprometida la palabra del Jefe de Estado...

LO BUENO, LO MALO Y LO FEO

Buenísimo lo del cambio de bombillos para ahorrar energía. Mejor si se comienza por el Zulia, que duplica los niveles de consumo del continente. Bueno también, que el propio Presidente mencione críticamente la proliferación de los juegos de lotería, pero sorprende que no diga algo referido al juego derivado de las carreras de caballos. Creo -con William Izarra- que todo eso, más el deporte dizque “profesional” y los “modos de vida” que inocula la televisión, alimentan sistemáticamente la alienación en la que vive nuestro pueblo. Excelentes los anuncios de los correctivos que se le impondrán a la banca, que como se ha visto prácticamente “obligada” a bajar las tasas activas de interés (que cerraron en 15,3 % en diciembre), se excedió en los cobros por concepto de “servicios bancarios”, y en estos basó sus exuberantes ganancias. Dentro de estos abusos, encontramos las comisiones exageradas que cobran (5 %) por el retiro de “avance de efectivo” (en la modalidad de los $ 400 efectivos mensuales que otorga Cadivi), en cajeros electrónicos fuera del país, a lo que le suman cargos por haber efectuado la compra en el exterior, los intereses que genera el dinero prestado por el banco, más el pago por “tener” la tarjeta de crédito. Y con las tarjetas pre-pagadas cobran igual, a pesar de que el dinero lo pone antes el cliente. Y por último, y muy esperado por toda la población (menos por los super-beneficiados), lo del tope a los sueldos de funcionarios públicos. El Presi habló de 3 melones contra los 6 del proyecto de Tascón y los 93 diputados. Algunos dicen que ni tan calvo ni con dos pelucas. Lo obsceno son los diferenciales entre salario mínimo y los “topes” que hoy (no) existen. Mientras más bajo sea el “tope”, más se facilitará la igualdad, las compensaciones y la equidad: Ingresos de acuerdo con la importancia del trabajo o servicio prestado al país y a las necesidades de cada quien.

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