La inmensa y terrible desinformación que le han inducido a la oposición, se aprecia o se desprecia todos los días en las estupideces que pueden leerse en las redes, por opositores disociados y disparatados. Uno de ellos, en realidad una fémina, asegura que al Director de la OMS le paga Maduro para que oculte los muertos en Venezuela. La imagino similar a la doñita que hizo pupú en Caracas durante una manifestación desnutrida de la oposición, filmada en el acto íntimo número dos imitando a los hombres pela traseros que habían manifestado bajándose los pantalones un tiempo antes, quedó asquerosamente conocida.

Quiere decir que el honorable director de la OMS Tedros Adhanom Ghebreyesus nacido en Etiopía actual Eritrea, un biólogo de 56 años de edad, inmunólogo de enfermedades infecciosas e investigador de sanidad, a juzgar por la oposición venezolana descocada e inepta, “redondea” sus ingresos según la mentalidad detritus de una doñita manifestante y las bombas puputov, gracias a lo que le mandan desde Venezuela. Irrespeto a quien desde 2017 es director general de la Organización Mundial de la Salud y nos ha advertido internacionalmente “Nuestro mundo está fallando, como comunidad global estamos fallando”

El director de la OMS fustigó la resistencia de algunos países para compartir dosis con pueblos pobres, contrastante situación con lo ocurrido en el combate al SIDA mucho más balanceado que en la pandemia de la Covid 19. “La diferencia está entre los que tienen y los que no tienen, obvia injusticia de nuestro mundo y desigualdad notable”. Al galeno investigador eritreo le acompañó el principal especialista en emergencias de la OMS, Mike Ryan, poniendo en evidencia la gran cantidad de países tercermundistas, mucho mejores en su accionar que el de naciones desarrolladas, negadas a la vacunación masiva gratuita.

Venezuela sigue organizando la vacunación gratis, a pesar de haber pagado vacunas que nos confiscaron en el exterior, perdiendo nuestro dinero por causa de la desparramada guerra asimétrica, nos robaron parte de lo cancelado. Hasta el momento de escribir esta opinión ácida, el reporte mundial alcanzaba a 180 millones 506 mil 924 contagios, 3 millones 911 mil 517 fallecidos y 2 mil 847 millones 219 mil 598 dosis de vacunas administradas. El detalle es la incomprensión salvaje de las grandes potencias responsables del terrorismo económico, que nos bloquean y prefieren perder vacunas antes que hacer justicia en el combate internacional a la pandemia.

Valerosamente mantenemos la flexibilización y organizamos la defensa doble, a la calamidad sanitaria y a la agresión internacional. Los hechos se suscitan y en algunos detalles vuelven a descollar los modernos Bicho Bruto de la política nacional, que no son más lerdos porque su capacidad descriptiva no les deja expandir sus torpezas, ya no en el descuido a la terrorífica enfermedad coronavirus, sino en dejar constancia que lo de ellos es imitar a “Bicho Bruto”, tira humorística famosa en el periodismo de mediados del siglo XX, emulada y estandarte de comportamiento de su desarrollo político con tal de oponerse a todo en la revolución venezolana.

Ya puede imaginar quién es en Venezuela el bicho bruto que a raíz del “atentado” en Colombia convenientemente desplegado desde la asustada oligarquía colombiana, peligrosa cual fiera herida, intenta desviar la atención de sus inocultables problemas. Los dirigidos por un presunto agredido en su aparato aéreo, no demoraron nada en averiguar de dónde y quiénes son los culpables, coordinados sus discursos al bajarse del helicóptero aseguraron que fue Venezuela la organizadora de los disparos con armas y balas de la FANB, tesis poco creíble y exagerada a saciedad por la prensa contraria a la revolución bolivariana.

Si Colombia el sábado 26 de junio padeció la muerte de 693 personas, por qué el bicho bruto no le da condolencias al pueblo y en su lugar hala mecate a su pana de robos afirmando “Nuestra solidaridad con el presidente Iván Duque por el atentado terrorista en su contra. El auge de estos crímenes en el vecino país tiene relación con acceso a recursos y protección de la narcoguerrilla desde la dictadura en Venezuela”, excusa del Ministro de la Defensa colombiano. Imposible ser más arrastrado, este bichito a nivel de las lombrices malignas que se enquistan en el estómago y el detritus, necesita darle la notoriedad que ansía, si lo hicieran preso.

Venezuela controla sus estadísticas en inteligente lucha contra la coronavirus, e impide desmanes que provoquen confinamientos a la población tras desmadres de permisos que se dan en otras partes del mundo, procurando satisfacer la economía por encima de la enfermedad, y retornan los colapsos de hospitales más la angustia de la población, a la que exasperados desinteligentes contrarrevolucionarios terminarán por decir que el globo terráqueo se contamina porque el virus fue sembrado desde Venezuela.

¿A esos jefes de la extrema impericia opositora es a quienes va a apostar usted en unas megaelecciones? Van bien pero que muy bien, bicho bruto and company. No es mucho pedir a quienes les moleste, les disguste, o no les parezca acertada la revolución bolivariana, que lo piensen, y vean los ejemplos a granel que observamos en el desastre de gobiernos de la ultra derecha pitiyanqui, y hagan el balance.