"Arriba el medalaganismo representativo", proceder de los "salvadores de la patria" que nos tienen hastiados con su Comando Unico La Oposición, insistentes en sinrazón disociativa. Nunca había leído tantas y tan estólidas explicaciones de aspirantes a conducir un país. Venezuela es fuente de sorpresas acerca de lo que no se debe hacer en la oposición, arrojar al cesto de los desperdicios los conceptos de: patria, soberanía, independencia de criterio y autodeterminación, limitados los politiqueros a recibir dinero y obedecer argumentos de irracionalidad, e irresponsabilidad antinacional.
Ya en el 2002 y por varios años luego del ilegal "paro petrolero", medios de agitación social venezolanos en manos de editores de periódicos y concesionarios de televisoras y cadenas radiales, dieron profusas muestras de lo que no se debe hacer, creyendo que medios exaltados derrocarían a un gobernante o a un modelo político. Ahora, casi en anonimia, el cinismo acompaña a quienes se tornan cada vez peor en sus desplantes, y en medio de los percances reciben cobertura legal e ilegal disimulócrata en su escaso alcance ante la opinión pública en general.
Los organismos de ayuda a la contrarrevolución venezolana, en arranques sorpresivos de sinceridad, asqueados de los gansters que absorben el dinero, han confesado mediante comunicado que, del dinero faltante de recursos destinados, en este caso por la Agencia de los EE UU para el Desarrollo Internacional, USAID por sus siglas en inglés, apenas el 2% se usó para ayudar dentro del país. Ante tamaña confesión de un organismo non santo que sin embargo guarda algo de corrección a fin de evitar que los encarcelen, la respuesta de la ultra derecha venezolana ha sido exiliarse en embajadas de gobiernos jurados enemigos del socialismo bolivariano.
Una excelente concepción bolivariana que hoy se amplía era escondida de nuestra historia por intelectuales admiradores de EE UU, haciendo culto al blanco instruido, e ignorando a quien considerasen indio o negro ignorante, racismo histórico muy bien descrito por el profesor de la Universidad de Los Andes José Sant Roz, quien se lamenta porque estamos pagando una catástrofe humana que observamos a diario en cierta juventud sin moral, sin suelo al cual amar, sin historia y sin ética, cuyos sueños y principios están reducidos a meras imposiciones del negocio de la moda, el consumismo, la droga y la muerte de la imaginación, causa insuflada por intelectuales racistas clasistas, por muchos años empeñados en desaparecer a Bolívar llenándolo de ritos, cuentos, discursos y homenajes en cada efemérides patria, lo que lograron hasta las elecciones de 1998.
En este momento crucial debemos sacudirnos y me pronuncio por un contundente "go out", o "gringo go home" a la política infame de los dominadores anteriores, auténticos falsarios en democracia representativa. Venezuela abraza a nuestros libertadores: Bolívar, Sucre, Urdaneta, y tantos hombres y mujeres de la dignísima gesta emancipadora, tomando en cuenta que si los capitalistas pro USA no dejaban asumir en Perú al presidente electo y proclamado 42 días después, el maestro rural y campesino Pedro Castillo, pudo más el pueblo votante sobre quienes siguen la ruta de derrocar presidentes: Zelaya el hondureño, Morales el boliviano y Lugo el paraguayo, o con medidas legislativas expulsaron a Cristina y Dilma en Argentina y Brasil, o impiden la candidatura de Lula Da Silva en Brasil.
98 % no le gana al 2 %, simplemente porque a gringolandia y sus intereses gegráfico-ideológicos no le convenga, soterrada o abiertamente dominan a través de los presuntos demócrata representativos ladrones, que al recibir los dólares para "la crisis humanitaria", malandrines y cobardes se quedan con el botín, se amparan en el asilo diplomático o huyen a EE UU que acoge siempre cleptómanos o robadores. En la historia de presidentes en USA hubo uno que dijo refiriéndose a Anastasio Somoza dictador militar nicaragüense "he may be a son of a bitch, but he is our son of a bitch", busque la traducción y gracias por leer la opinión, dese cuenta que así son.
