En un programa con la periodista Vanesa Davis por VTV, el Sociólogo revolucionario y director de ALCASA, Carlos Lanz, cuando la fablistana le preguntó que como hacia el para implementar la cogestión y otras series de ideas socialista siendo que no existía la ley de cogestión y todavía estaban vigentes muchas leyes que impedían esa realización; el referido invitado respondió que “EL TRAMPEABA”, y por eso había sobrevivido. Yo desde aquí lo corrijo y le digo, CARLOS LANZ TU NO TRAMPEAS, TU CUMPLES CON EL MANDATO CONSTITUCIONAL DE PARTICIPACION PARTICIPATIVA Y PROTAGÓNICA DEL PUEBLO EN LO ECOMNOMICO, A TRAVES DE LA AUTOGESTION, COGESTION, EMPRESAS COMUNITARIAS, ETC.
Entonces si Carlos Lanz, no trampea, y está implementando la cogestión, quien trampea. Trampea la chorrera de asesores, jurídicos, económicos, administrativos que tiene la CVG los cuales vienen de la nefasta era Leopoldosucristafigarelista y fueron ratificados, mejorados y su poder ampliado por Rangel Gómez que tienen el esquema, hondamente sembrado, de la constitución del 61 (La muerta), y se oponen y le temen a todos los cambios (Aun al constitucional); y le dicen al sociólogo revolucionario que esas cosas no se pueden hacer porque son “ilegales”. Trampean los tribunales de la Republica que aun siguen aplicando de facto la constitución del 61 y todavía no han internalizado la constitución bolivariana porque sencillamente no creen (Ni sienten) en eso, y por eso se teme llevar esa controversia a los tribunales porque saben que la revolución recibirá un “palo cochinero”. Trampea el TSJ y específicamente la Sala Constitucional quien desde hace rato ha debido decir que se pueden implementar en las empresas del estado y en cualquier lugar la autogestión, la cogestión y las comunas de producción en aplicación directa de la constitución por ser la ley de leyes y la única ley aprobada por el pueblo, y no obstante no lo hace asó; pero en contrario, si “legislan” indebidamente, eliminando un articulo de la ley de impuestos a la renta, con el mero fin de quitarse ellos, y a todos los que ganan cuantiosas sumas millonarias, una carga tributaria en donde la nación pierde una billonada. Hacen trampa los contratistas y demás proveedores (Vitalicios y hereditarios algunos) de la CVG, quienes hacen el lobby en Miraflores para que boten al Profesor de ALCASA como lo lograron exitosamente con Víctor Álvarez (Aunque este también pifió). Trampea una mafia sindical que ha medrado de las diversas presidencias de las factorías del aluminio y de la CVG y que ve en la autogestión y cogestión la pérdida de sus intereses y negocios y hacen presión política para que boten o detengan al gerente revolucionario y al movimiento alcasiano que es el más avanzado en la zona.
Todos estos señores, anteriormente mencionados, son los que verdaderamente trampean y no solo en contra de ALCASA o la CVG sino que trampean en contra de la Constitución del 99 para que esta no tenga vigencia plena y eficaz y sigan, de facto, reinando las ideas de “la muerta”, trampean al país cuando se oponen a la implementación del socialismo e impiden que tengamos un desarrollo propio y autónomo y así favorecer al Imperialismo Yanqui, traicionando con ello a la patria. Trampean a los trabajadores cuando le impiden que desarrollen sus fuerzas productivas asumiendo ellos la dirección y el control del negocio del aluminio que lo harían mucho mejor, no solo en beneficio del país y la región sino de sus familiares y vecinos. Eso son los verdaderos tramposos Profesor Carlos Lanz, y usted no es un tramposo, usted es un cumplidor de la ley, de nuestra carta magna, como debe ser y usted está luchando por imponer la vigencia de ella a costa de su propia seguridad personal.
Lamentablemente todavía estamos en un país en donde la ley la tiene los usurpadores y quienes fueron desplazados por la historia que se niegan y se oponen ferozmente a ser desplazados. A veces las cosas no son asuntos de leyes sino de pueblo revolucionario, pero ya al pueblo le están empezando a roncar los motores, en hora buena, ¡albricias!
Y para concluir va esta moraleja, recuerdo una anécdota del Comandante Fidel Castro ante el periodista Vladimir Villegas quien lo entrevistó por VTV, en una de sus varias gratas visitas que nos ha dispensado, y dijo que al principio de la revolución cubana, ellos, la dirección, aprobaron una ley de reforma agraria, en donde se cuidaron mucho de respetar la propiedad privada y no tocar mucho los intereses de los terratenientes para evitarse conflictos internacionales, pero el pueblo mandó para el cipote esa ley de reforma agraria de corte reformista y tomo las tierras con machete en mano y las puso a producir colectivamente.
franciscosierracorrales@yahoo.com.ar
