Crítica ácida

Venezuela un cuarto de siglo vibrante entre la paz y la tormenta

La panorámica política nacional cambió hace 25 años, colocándonos en el huracán de las noticias mundiales, Venezuela, país vencedor ante el imperialismo conquistador, despertó para el conocimiento histórico en 1810 el destape de los pueblos en busca de su libertad auténtica, pasando de Capitanía General sin nombradía relevante, a ser un ejemplo suramericano de libertad con pensamientos republicanos y grandes batallas, bajo el mando de hombres y mujeres de esencia y conciencia libertaria.

Van a cumplirse en el 2024, dos siglos y algo más de aniversarios en decisiones patrias: 19 de abril 1810, 5 de julio 1811 y 24 de junio 1821 destacados en la conquista de nuestras libertades como nación independiente y soberana, vencedora ante el imperialismo hispano, derrotando a sus escuadrones de élite, vencedores en el continente europeo, aunque con dificultades, acá vencidos por suramericanos de temple y arrojo.

En el moderno país potencia, redescubierto a partir del 2 de febrero 1999, celebramos rumbosamente con conciencia el numen del proceso de cambios bautizados bolivarianos, he visto actos de recordatorio a aquel 4 de febrero de 1992, 32 años atrás, protagonizado por nuevos patriotas inspirados en pensamientos antiimperialistas de nuestros héroes de la gesta magna al sacudir el imperialismo hispano torturador, asesino y pretendido enterrador fallido de nuestra cultura, solo defendido ahora por lacayos de nuevo cuño, enceguecidos por neocolonialistas aplicándonos nuevos métodos con redivivas artimañas dominantes.

Nos convoca la historia a no perder la oportunidad de seguir siendo emblemáticos en la admiración de millones y millones, quienes a pesar de la conducta miserable de la prensa hegemónica salvaje desnaturalizando la revolución bolivariana, nos citan, se interesan, se atreven a enfrentar a la prensa engañosa, nos mencionan en cualquier lugar del globo terráqueo, mientras continuamos en revolución socialista netamente venezolana haciendo con aciertos y errores, ante lo cual es el pueblo quien juzga y no los intereses dominantes del capitalismo asesino, voraz y de inmunda conducta nazifacista.

Cierto es que la verdad no es única, los seres humanos naturalmente tenemos distintos puntos de vista, pero, en 2024 vemos palmariamente el derrumbe de los belicistas, frente a la paz reclamada, nos guía en buena parte la instantaneidad de la información y el combate a la desinformación de los guerreristas bombardeadores, solo los muy lacayos acostumbrados a honrar a su secuestrador, para domeñar a más y mejor a los deslumbrados por el consumismo. Nos atrevemos a criticar ordenadamente a los adversarios de la revolución bolivariana, amiga de la paz y la felicidad, llena de historia, amor y protagonismo sin temor.

No me descalifique, piense en quienes a usted lo descalifican de ambos lados cuando hay amén de intereses de capital, deseos normales de ganar al adversario en lo que sea, le recuerdo que, en política como en el amor vale todo, menos la insinceridad, usted es su propio juez, no se deje ganar por la ignorancia sin culpa, (no podemos saberlo todo), no olvide que, a veces somos ignaros es decir, mal informados, solo un ser que nos vea desde el infinito como usted lo conciba según la religión, podría pedirle con justicia divina su redención sincera. Lo cierto es, en Venezuela hacemos historia y convocamos al pueblo a aceptarla o rechazarla, mayor libertad imposible. Orgullosos de no parecernos a ningún otro régimen político, y en lo posible impulsarles nuestro humanismo bolivariano socialmente protagonista, superando calamidades creadas en nuestra contra.



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Luis Sánchez Ibarra


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