Asumiendo que todo transcurrirá con normalidad, si es que podemos calificar de normal las cosas que se ven en campañas electorales, y como está previsto el 28 de julio se llega a las elecciones presidenciales, cabe preguntarse ¿quién será el ganador en las elecciones presidenciales del 28 J?.
Es claro que en el contexto de la polarización actual, uno de los polos terminará favorecido por los electores y alcanzará el objetivo, triunfar en las elecciones, pero no faltan quienes insisten en que podríamos llegar a un escenario donde el evento electoral se suspenda. Como es claro que cualquier cosa puede suceder, asumimos que dentro de 48 días habrá elecciones presidenciales. Partiendo de ello, mi pronóstico.
Sin pretensiones de analista riguroso y sin las infalibles estadísticas predictivas que con sus proyecciones permite a algunos casi que infalibles predicciones, me atrevo a pronosticar quién será el indudable perdedor en estas elecciones presidenciales del 2024, así como las principales razones que fundamentan mi pronóstico. Apelando a la lógica inversa, más que intentar determinar quién triunfará el 28, intentaré determinar al perdedor.
Es claro que de los dos polos enfrentados solo uno triunfará, no hay términos medios en eso y la lógica electoral indica que aunque sea por diferencias mínimas solo uno ganara. La conseja popular dice que por un voto se gana o se pierde, Sin devolvernos mucho en el tiempo, ya vivimos el proceso en el cual fue electo para su primer mandato en el 2013 el actual Presidente Nicolas Maduro. Aunque desde el polo perdedor se mandó a expresar "su arrechera" a la gente, dejando un saldo trágico de vidas humanas perdidas y bienes materiales perdidos, fue claro desde el principio quien había ganado.
Pero volvamos a los tiempos de hoy, en los que los polos enfrentados apuestan por dirimir en las urnas el destino de quien o quienes tendrán en su poder la Presidencia de la República. Es claro que más que elegir al Presidente, estamos eligiendo a quienes tendrán el Poder Ejecutivo bajo su control. No todo es lo que parece.
Así como muchos pueden afirmar que aunque Nicolas Maduro Moros ocupa la actual Magistratura, no necesariamente concentra el poder de manera absoluta (por mucho que algunos insisten con lo del régimen). Según lo aparente el polo enfrentado al actual gobierno presenta una candidatura que según la correlación de fuerzas (entiéndase votos en las urnas) podría imponer cambios en la agenda en caso de llegar a ser favorecido por los electores. Pero volvamos a la predicción del perdedor de todo esto.
Es indudable que en un panorama como el actual de dos bloques polarizados, en el que el resto de las candidaturas tienen opciones mínimas de capitalizar votos. Es claro que entre el bloque de apátridas que sueñan con conquistar el poder para volvernos a su "paraíso de la cuarta", por un lado; y el bloque de los traidores del Legado, por el otro, quienes apuestan a mantenerse ofertando políticas de "crecimiento económico" de su Nueva Época que profundiza brutalmente la desigualdad social y la pérdida de las conquistas y derechos de las mayorías, el perdedor irremediable de todo esto resultara el pueblo.
Como dice una consigna que anda rodando por allí, gane quien gane el 28j perderá el pueblo.