Que viva España

Entre flores, fandanguillos y alegrías. Nació mi España, la tierra del amor, sólo Dios pudiera hacer tanta belleza y es imposible que puedan haber dos…asi se escuchaba a todo volumen en la cabina del avión de la Real Fuerza Aérea Española, dónde Edmundo Gonzales Urrutia salió del país escapando de la dictadura venezolana que le dio salvoconducto para que su escape no fuera tan traumático..

Entre flores, fandanguillos y alegrías. Nació mi España, la tierra del amor, sólo Dios pudiera hacer tanta belleza y es imposible que puedan haber dos…así sonó Billo en los hogares venezolanos este domingo de gracia, felices de que Edmundo se fuera pa la madre…patria.

Esta bien, el sexagenario que fue envuelto por María Corina Machado ha pagado con su salud estos días que vivió en su clandestinidad y que, diría él, fueron más rudos (Quizás por la edad) que su accionar en sus tiempos de mozo cuando murieron algunos jesuitas por los hilos que movieron desde la embajada de Venezuela en El Salvador.

Que bueno que se fue del país, no se a ustedes, pero a mi me tenía preocupado que el hombre se muriera en nuestra patria producto del stress al que la Machado lo sometió, muerte que seguramente la machado buscaba para achacárselo al gobierno y nosotros los chavistas.

Ya se fue, que le vaya bien, sabe que se ganó un boleto sin regreso a un país en que no lo sentimos uno de los nuestros, pa acá no puede volver y allá ellos (su familia) si lo van a hacer mártir desterrado, aunque es muy probable que ellos tampoco quieran a este país, así que, Que viva España que se los llevó, que viva España, la España que se enfrentó a Bolívar y que, aún hoy, sigue recogiendo la que barremos de aquí.

Sigamos trabajando por nuestro pais, página pasada, Viva Venezuela Soberana, Viva Venezuela libre de esos lastres.



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1064 veces.



Oscar Jiménez


Visite el perfil de Oscar Jiménez para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Oscar Jiménez

Oscar Jiménez

Más artículos de este autor