La incompetencia psíquica política del “grupillo” estudiantil que está siendo manipulado por el postgolpismo nacional e internacionalmente, los que están “calentando” la situación en estos últimos días para mostrar, una vez mas, al proceso revolucionario que vive la nación como una brutal e ignominiosa dictadura que viola supuestamente derechos fundamentales, en este caso, la libertad de expresión, se quedaron “ATASCADOS”, cuando tuvieron la oportunidad histórica de su vida, para combatir por sus ideas, desde la casa donde se tiene que expresar con libertad las inquietudes, los malestares y las vicisitudes que se puedan estar viviendo. Es precisamente allí donde un luchador real político social demuestra el porqué el rechazo contra lo que ellos llaman “dictadura” que los oprime y los confunde en el hacer de la vida y el hacer del pensar.
Penosamente quedo demostrado que ese estudiantado que es sacado a la calle por el postgolpismo, es una juventud despolitizada, ignorante, confundida, manipulada, que digan lo que digan, hagan lo que hagan, fue derrotada política, estudiantil y moralmente y que lo fue no solo ante el pueblo venezolano, sino ante el mundo entero y que quienes le ocasionaron esta terrible vergüenza fueron sus propios compañeros, pero, con la diferencia de que estos están abrazando y defendiendo el proceso nuevo que vive la patria y lo mas importante de todo, lo hicieron con conciencia política, estudiantil, con conocimientos plenos de la problemática que vive y tiene en sus raíces ese sector social, como también del pueblo al cual pertenecen.
Los derrotados pidieron debatir, solicitaron reunirse con el defensor del pueblo, entregar un documento ante el Tribunal Supremo de Justicia, conversar con el Fiscal General de la República, perder clases todos los días, pidieron ir a la Asamblea Nacional y la “DICTADURA” (según ellos) les complació todos sus caprichos, pero cuando llego la hora de la verdad, huyeron como cobardes para cobijarse en las faldas de quienes los están manipulando y pagando, y para ahora llorar lo que no fueron capaces de defender como combatientes en una simple batalla de ideas.
¿Qué libertad de expresión exige quien cobardemente se caga y no expone un carajo?
¿Qué respeto y que credibilidad se puede tener a quienes insultan y ofenden al pueblo y a sus propios símbolos patrios, simplemente porque el loco Miguel Ángel Rodríguez, llamó en el ultimo programa de RCTV a que voltearan e insultaran a nuestro pabellón tricolor?
¿Dónde esta la dignidad para hablar de libertad siendo desgraciados protectores de la esclavitud?
No obstante, ese comportamiento ya nos es familiar, tiene la naturaleza accionaria postgolpista de la incompetencia política, característica que la ha venido distinguiendo, en su obligada auto extinción, porque se distingue en la competencia de la incompetencia, mostrando esa significativa ausencia de valores que subestiman a nuestro pueblo bajo la prepotencia de la estupidez, factores que hoy ellos conforman como si todavía estuviésemos viviendo la vieja historia de aquella dictadura que nos tocó soportar y que llamamos “partidocracia”.
Lo cierto es que han prometido “continuar jodiendo”, pero en las calles de Venezuela estaremos alerta todos, tienen que convencerse de que no volverán, “ni porque vuelvan caras”.
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