Apaga el televisor y enciende la razón

Es lamentable que tengamos que decir eso, porque uno de los inventos más revolucionarios que ha realizado el hombre es la televisión, claro, siempre que ella sea para liberarlo, no para esclavizarlo, atarlo a esa caja del idiota y no soltarlo hasta que lo ha destruido como ser pensante. La llamamos “la caja del idiota”, porque el Sistema Capitalista lo que quiere de su juventud, es convertirla es una gigantesca masa de consumidores de productos, ropas de las mejores marcas, computadoras, DVD, mp3, carros, zapatos, etc, para eso le cambia su mente, tiene las herramientas a su alcance, horas y horas se la pasan los adolescentes frente a la dichosa “caja del idiota”, mientras sus padres se hacen de la vista gorda, porque ellos a su vez fueron absorbidos, le extirparon su voluntad y mente. Ahora tenemos a nuestro alcance la televisión por cable, con las herramientas más sofisticadas para esa alienación que hacen del Latinoamericano otro ser alienado del Continente, todos estos canales conocidos, por ejemplo nombremos a Univisión, trasmiten una forma de vida, una música alienante, que promueve la estupidez, por ejemplo tenemos el reggeton, una música sin conceptos que nos ofrece un tipo de sexo fácil, nos muestra una degradación de la mujer, del hombre y de la vida. El regettonero cree que inventó el sexo, y que puede disponer de él a su antojo y conveniencia, degradándolo, es casi una masturbación mental. Mientras otras culturas reverenciaban el sexo y lo adoraban, este Sistema Capitalista inmoral lo degrada y pervierte. El reguetonero insulta el lenguaje y el sexo, lo menosprecia, con la complicidad del Estado Socialista, que se supone que conoce todas estas cosas, que tiene un Ministro de Cultura para que actúe precisamente en la cultura. ¿Acaso esa inacción y silencio para debatir lo que en realidad somos y queremos de la cultura, no es una forma de alienación que tienen a su vez sus dirigentes políticos del Estado Socialista? Este silencio de los que manejan la cultura podría indicarnos que no es una revolución cultural, que no llegan ni quieren llegar al centro del problema, que no quieren tropezarse con problemas a futuro, que es una revolución cultural con maquillaje suave, ¿acaso que se hace una revolución cultural repartiendo solamente libros?

Primero debemos estar claros en lo que queremos ser. Todavía no hemos “llegado a ser”, se deben promocionar nuestras raíces, pero no teóricamente, debe ser algo vivo, sentirlo, enseñarlo. Pero cómo lo pueden enseñar personas comprometidas con la revolución, que cuando patrocinan una actividad cultural, lo que sale por sus alta voces es música de Regueton, de paso la mezclan con música de Alí Primera, Qué ofensa para el cantor del pueblo. Es evidente el grado de descomposición social que existe actualmente, no se puede ocultar de ninguna manera, la agresión y violencia cotidiana que sentimos como ciudadanos, la falta de comunicación entre los Venezolanos, nos hemos acostumbrado a gritarnos mutuamente, a solucionar nuestros problemas como gallitos de cría, la otra alternativa que estamos viviendo es que nos dicen nuestros líderes socialistas, existe democracia, cada quien dice lo que quiere, jamás había existido tanta libertad para decir lo que se quiera. Si, pero ¿acaso se escucha?, ¿estamos en condición de oír? ¿Escuchan nuestros líderes socialistas verdades que sirvan para construir? ¿Podremos crecer como ciudadanos creyendo que somos infalibles? En el caso particular del regueton, se promueve más esa música que el baile del tambor, con toda su magia y sensualidad. Si tenemos en nuestras raíces esta mezcla extraordinaria de razas, si existe algo que nos une, por ejemplo el baile, el tambor, la sensualidad de la mujer más bella del mundo: la mujer Venezolana, ¿Por qué se patrocina la música asquerosa del regueton sobre nuestra cultura, raíces, sueños?.

sedelu@hotmail.com




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Sergio Delgado


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