La inobservancia de los preceptos cristianos es un vivo reflejo de la decadente Iglesia Católica…
Los casos de pederastia en la Iglesia Católica, son una serie de acusaciones de abuso sexual hechas contra sacerdotes de la Iglesia Católica en la segunda mitad del siglo XX. A pesar de que tales cargos ya habían sido formulados en años anteriores, el tema ganó notoriedad durante el último lustro de la década de 1990, y más aún, en recientes casos de arreglos extrajudiciales ventilados por los más destacados diarios del mundo.
En mayo de 2001, el Cardenal Joseph Ratzinger, prefecto por la Congregación para la Doctrina de la Fe y futuro Papa Benedicto XVI, envió una carta a todos los obispos católicos declarando que las investigaciones internas de la Iglesia sobre los casos de abuso sexual infantil estaban sujetas a secreto pontificio y que no debían ser denunciadas a las fuerzas públicas hasta que las investigaciones fueran completadas, bajo pena de excomunión (…)
En los casos de abuso sexual se hallaban involucrados sacerdotes diocesanos (varones todos) y miembros de varias órdenes religiosas católicas (de ambos sexos). Los casos por lo general se dieron en seminarios, escuelas y orfanatos, donde los niños estaban bajo el cuidado del clero. La Iglesia y sus líderes recibieron muchas críticas como consecuencia de estos casos, en especial cuando se descubrió que algunos miembros de jerarquía superior del clero los encubrieron. Por ejemplo, se alega a menudo que en muchos casos, tras conocer por medio de los padres, o profesores, el obispo de la diócesis correspondiente sobre los casos de abusos, estos obispos generalmente se limitaron a trasladar a estas personas a otra diócesis, donde reincidían en sus prácticas sexuales delictivas.
Es aborrecible que en pleno siglo XXI se ejerza el sacerdocio de Cristo con total y absoluta impunidad, sin que haya pena, castigo o encarcelación por tantos abusos sexuales cometidos contra niños menores de edad. Y sin que se hayan tomado drásticas medidas, para castigar con todo el peso de la ley a esa casta privilegiada (depredadores sexuales) de curas inmorales. Desde un punto de vista legal, la más seria ofensa, tras el abuso sexual en sí, fue el hecho de que los clérigos de mayor jerarquía, quienes estaban al tanto del problema, no denunciaron los crímenes directamente a la policía. Esto ocurrió en muchos casos en muchos países, y ha tenido consecuencias extremadamente negativas
El portavoz del Vaticano, el jesuita Federico Lombardi, afirmó recientemente por Radio Vaticano, sobre el acuerdo alcanzado por la arquidiócesis de Los Ángeles para resarcir económicamente (con 660 millones de dólares) a 508 víctimas de abusos sexuales durante años. ¿Dónde queda el daño emocional, psicológico y moral de los agraviados, sin que haya una pena fuerte y encarcelamiento para estos monstruos de niños?
La periodista Sanjuana Martínez y la editorial Randon House se han atrevido a publicar una espeluznante investigación sobre los sacerdotes pederastas en México y sus encubridores quienes les ayudan a huir de la justicia. El libro titulado El Manto Púrpura, sigue con detenimiento los pasos del sacerdote violador Nicolás Aguilar Rivera de quien se tiene hasta el momento documentados casi 90 abusos sexuales con niños.
El cardenal primado de México, Norberto Rivera Carrera, no hizo caso a las denuncias de las víctimas sino que envió al cura Aguilar Rivera a los Estados Unidos, a la diócesis de Los Ángeles para alejarlo del escándalo. Sin embargo, en los nueves meses que Aguilar estuvo en California abusó de 26 niños más…
En ese contexto quisiera saber qué opinan los lectores acerca de la iglesia católica y sus curas...... ¿Creen ustedes, como muchos suelen pensar, que la iglesia es una farsa? ¿Y que muchos la catalogan no como los verdaderos mensajeros de Cristo, sino como el ejercicio de la hipocresía, elevada a su máxima expresión…?
Se jactan de hablar de bondad, caridad y sobre todo de prejuzgar o juzgar a la homosexualidad, siendo ellos no solo homosexuales sino pedófilos y abusadores de menores.
joseagapo@cantv.net