“Yo mandé a no votar en las elecciones parlamentarias pasadas, para que esta Asamblea Nacional quedara deslegitimada. Porque creemos que el CNE no es un árbitro imparcial, por eso llamamos a no votar. Ahora estamos aquí, presentes en la Asamblea Nacional para desarrollar nuestra propuesta en cuanto a la Reforma Constitucional, porque creemos que es un traje a la medida del presidente Chávez. Por eso estamos aquí”.
De ser sincero, esas tenían que ser las palabras de Henry Ramos Allup en la Asamblea Nacional, ellos –los adecos-mandaron a su gente a no votar en las elecciones a diputados a la Asamblea Nacional, justamente para deslegitimar la Asamblea, y ahora, el lunes pasado, Henry Ramos se presenta a la Asamblea a decir lo que dijo, es decir, el ejercicio de la democracia que AD nunca permitió, hoy en la Asamblea Nacional le dan un ejemplo de democracia a los que antes no permitieron nunca ese ejercicio.
“Yo vengo aquí, a la Asamblea Nacional, a decir que debemos pensar mejor esta Reforma Constitucional. Que tenemos que convocar al pueblo para que participe, aunque reconozco, que nosotros en Primero Justicia lo invitamos a no participar en las elecciones para elegir parlamentarios a la Asamblea Nacional. Ahora que estoy aquí, recuerdo que nosotros en Primero Justicia tuvimos un debate y decidimos no votar para deslegitimar esta asamblea, sin embargo, hoy, con mi cara bien lavada, vengo aquí a darle las gracias a ustedes que me reciben para hacer mis planteamientos”
Esas tenían que ser las palabras de Julio Borges en la Asamblea Nacional el lunes pasado. Ahora, cuando requiere participar, la Asamblea lo deja participar, un derecho que el le quitó a su militancia en el momento de elegir a los diputados que conforman esa Asamblea. Es importante que la sinceridad prive por encima de todas las acciones políticas. Fidel Castro dijo en la entrevista con Ignacio Ramonet, que “cuando estás en una batalla política no puedes recurrir a la mentira porque te van a descubrir”.
Y esta gente de la oposición sigue mintiendo. Sigue buscando otra ruta para llegar al poder y no lo dicen. Ninguno reconoce sus fracasos. Y ahora, lo peor, muchos de ellos están deseando que el imperialismo y la oligarquía boliviana le den un golpe de estado a Evo Morales porque así, piensan ellos, van a derrotar a Chávez.
Salgo a caminar.
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